La Alhóndiga une el espacio y el cuerpo

Un gigantesco globo de plástico transparente alberga desde ayer actividades artísticas en el atrio de la Alhóndiga, en Bilbao. Es la instalación The Big Medusa (la gran medusa), un proyecto del artista Marco Canevacci en colaboración con un equipo de arquitectos, que se ha convertido por tres días en escenario de actuaciones de la artista Bridge Markland, sesiones de DJ´s, exposiciones de libros y exhibiciones de deporte rural dentro del programa de artes en vivo Espacio&Cuerpo. La medusa, dice su autor, es instalada generalmente al aire libre por cortos períodos de tiempo, e invita al público a pensar sobre las diferencias entre lo público y lo privado, lo que queda dentro y fuera de la gran carpa de plástico, en el espacio urbano.

El programa de las jornadas reunirá en distintos espacios de la Alhóndiga a una decena de artistas vinculados a la danza contemporánea, la performance y las instalaciones que, según el proyecto del comisario Mateo Feijoo, mantendrán un diálogo entre el cuerpo y el espacio. “El cuerpo expresa siempre un recorrido, un trayecto entre el espacio y el tiempo”, explica Feijoo. ¿Por qué acercarse a esa relación desde el punto de vista artístico? “El cuerpo da información diferente según el espacio en el que se presenta”, responde el comisario.

Las actividades incluyen un taller en el que la compañía portuguesa Teatro Útero lleva a los actores y bailarines participantes a la calle para captar la atención de los transeúntes.

Canevacci también participa con una instalación sonora, en la que ofrece conciertos de 10 minutos para solo dos personas. Espacio&Cuerpo también ofrece representaciones de danza de Martín Padrón, del Centro Coreográfico de La Gomera, y de la compañía griega Quasistellar.