Quiroga se queda sola tras el conflicto con el representante de EA

Los portavoces de todos los grupos del Parlamento vasco, salvo el PP, han mostrado en la reunión de la Junta de Portavoces de hoy su desacuerdo con la presidenta de la Cámara, Arantza Quiroga, en el conflicto que suscitó el viernes con el representante de EA, Juan José Agirrezabala.

Quiroga se ha visto así privada de todo apoyo a la prohibición, comunicada por correo electrónico, de que una alcaldesa y un concejal de BIldu acompañaran Agirrezabala en una rueda de prensa sobre la leyes de Cajas y Municipal. Esta se celebró finalmente, pero Quiroga amenazó por carta al parlamentario con tomar medidas disciplinarias contra él por haber desobedecido su orden.

Aunque la Junta de Portavoces no ha votado ningún texto de reprobación, porque el PSE-EE no ha querido llevar al extremo el conflicto, su portavoz, José Antonio Pastor, sí intervino, como los otros, para mostrar su disconformidad con la actuación de Quiroga. “Entendemos que ha tenido una posición arbitraria”, más en términos de “prohibición preventiva” que de respuesta a “situaciones reales”, ha dicho después.

El PSE sí apoyó la actuación de la presidenta cuando el 24 de abril ordenó desalojar a varias personas que, tras ofrecer una rueda de prensa junto a parlamentarios, intentaron encerrarse en la sede de la Cámara. Hoy, en cambio, no lo ha hecho y ha pedido, junto a los otros grupos, con la excepción del PP, “un protocolo serio de actuación de la presidenta”. “Mientras tanto, lo que hemos hecho todos los grupos salvo el PP es pedirle a la presidenta que esos hechos no se vuelvan a repetir y decirle que no coincidimos con el planteamiento de prohibir una rueda de prensa”, ha indicado Pastor.

Quiroga, presente en la reunión, ha vivido de modo patente su desautorización, al expresar los portavoces uno por uno su apoyo al planteamiento de EA. La presidenta ha aludido al incidente citado del 24 de abril para explicar su actuación. No ha dado razón, en cambio, de los motivos por los que no respondió a las “varias” llamadas, según fuentes de EA, que le realizó Agirrezabal entre las nueve de la mañana, una vez recibió el correo electrónico con la prohibición, y las 11.30, hora de celebración de la comparecencia.

EA ha considerado cumplido su objetivo, y zanjada la cuestión, con la censura a la presidenta que considera implícita en el respaldo verbal de los portavoces al texto leído por Agirrezabal. En ese sentido se expresaron Ricardo Gatzagaetxebarria (PNV), Pastor —con los votos de cuyo grupo fue elegida—, Mikel Basabe (Aralar) y el parlamentario de Ezker Anitza, Mikel Arana. Solo la popular Laura Garrido se ha mantenido al margen.

Ha quedado entendido que los grupos “tienen derecho a organizar y decidir sus políticas de comunicación sin injerencias externas” y todos “se han sumado a la denuncia” de la “actitud arbitraria de Quiroga”, ha dicho EA en un comunicado. “Actuaciones de este tipo en nada contribuyen a la imagen de la institución”, añade la nota, tras valorar que la presidenta de la Cámara “además de evidenciar su obsesión con Bildu, se ha descalificado a sí misma al tratar de limitar el derecho a la libertad de expresión de un grupo parlamentario”.