La CGT cierra el Ayuntamiento de Jerez para rechazar los despidos

La actividad municipal se volvió a paralizar este martes por tercera vez en poco más de un mes en Jerez. Miembros de la CGT, el sindicato mayoritario en el Consistorio, bloquearon los tres accesos al Ayuntamiento desde las ocho de la mañana.

La jornada pasó en blanco en la administración. Los delegados sindicales no se apartaron de las puertas hasta las dos de la tarde, el límite de la jornada municipal en martes santo.

Ha sido la primera medida de presión ejercida por los trabajadores municipales tras conocerse que el gobierno local que preside María José García Pelayo (PP) va a aplicar en mayo un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) extintivo que va a afectar a 390 trabajadores del Ayuntamiento (300) y empresas (90).

La presidenta del comité de empresa, Nieves Calvillo, ya advierte que la paralización de la administración es la medida "más suave" de cuantas se van a programar para rechazar el plan de ajuste aprobado en el pleno municipal con el fin de que Jerez perciba 328 millones de euros de la línea de crédito ICO anunciada por el Gobierno para el pago a proveedores.

Los delegados sindicales sólo han iniciado las medidas de presión. Este miércoles van a completar un calendario de protestas para tratar de frenar el ERE. Creen que el gobierno local puede adoptar otras medidas de ahorro en el consistorio sin necesidad de "dejar en la calle a 400 familias". Desde la CGT ya calculan que sólo con la supresión de gratificaciones, productividades, horas extra y la reducción de altos sueldos "se ahorran siete millones de euros".

La alcaldesa Pelayo ha vuelto a subrayar la necesidad de "aprobar el ERE para solucionar la situación del Ayuntamiento". Al margen de los despidos, el gobierno pretende reducir 16 millones de euros en costes salariales.