Inactividad en San Caetano

Por encima de cifras oficiales y sindicales, los funcionarios están acostumbrados a medir el éxito o el fracaso de las convocatorias de huelga por la ocupación de la cafetería de San Caetano, la sede administrativa de la Xunta. Hacia las dos de la tarde, encontrar una mesa libre es prácticamente misión imposible. Es hora punta, y suele haber colas en la barra y clientes esperando por los que terminan. No es el caso de ayer. Apenas unas 30 personas en una cafetería donde caben más de 100. Cuatro mesas ocupadas y espacio libre en la barra. Reina el silencio.

 Similar tranquilidad se respira en los pasillos que conducen a la sala donde el presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, se dirige a los periodistas tras la reunión del Consello de la Xunta. Pocos funcionarios de un lado para otro y, tras los cristales, mayoría de sillas vacías. En la rueda de prensa, Feijóo cifra en un 35% los trabajadores de la Administración autonómica que han secundado el paro, y en un 65% los que han decidido trabajar. Entre los docentes, continúa, los huelguistas no llegan al 22%, que se elevarían al 26% en la sanidad pública y al 36% en el personal de los juzgados.

Puede ser que, como sostienen colaboradores del presidente, muchos funcionarios hayan solicitado días de libranza el 29-M, evitando así el descuento de la parte proporcional del salario. En todo caso, un guardia de seguridad de la caseta por la que pasa el grueso de los funcionarios de San Caetano frunce el ceño al conocer el dato oficial. “No creo que hayan venido ni el 40%”, calcula. Y zanja: “No hay más que ver cómo está de vacío el bar”.