La resistencia de los clásicos

Las Jornadas de Teatro del Siglo de Oro de Almería aguantan un año más. Van ya 29, pero en los últimos tres se ha luchado para mantener el apoyo económico de los patrocinadores habituales. La pugna ha sido especialmente compleja este año en el que la reducción presupuestaria supera el 50% -de 100.000 euros se ha pasado a 46.000 euros, más otro tipo de apoyo logístico por parte de las Administraciones- lo que ha condicionado la programación. Para salvar la cita, los organizadores, la Asociación Cultural Jornadas de Teatro del Siglo de Oro de Almería, se ha visto obligada a prescindir de los espectáculos en la calle, así como del ciclo de conferencias sobre investigación y creación teatral en el que se inscribían más de 100 personas cada año y se prolongaba durante tres días.

"Nos hemos tenido que adaptar a la situación de crisis, pero no hemos renunciado en ningún momento a la calidad", reconoce Ascensión Rodríguez Bascuñana, directora de las jornadas. La 29ª edición arranca esta noche en Roquetas de Mar con la obra Mujeres de Shakespeare, del cordobés Rafael Álvarez El Brujo y la clausurará Ur Teatro el próximo día 24 en la capital con Macbeth, dirigido por Helena Pimenta. Durante dos semanas se representarán más de 20 funciones en diferentes espacios escénicos de la capital y de otros 10 municipios.

Entre las obras, además de las mencionadas, destaca el estreno en Andalucía de Celestina. La Tragicomedia, de Atalaya, dirigida por Ricardo Iniesta (mañana, en el Auditorio de El Ejido a las 20.30). La misma compañía eligió el pasado año el Siglo de Oro para estrenar su Ricardo III.

El certamen continúa a pesar de haber perdido el 50% de su presupuesto

La adaptación de El caballero de Olmedo, de la Escuela Superior de Arte Dramático de Sevilla; la coproducción de los festivales clásicos El invisible príncipe del baúl, La escuela de la desobediencia, con María Adánez y Cristina Marcos, y el clásico El sueño de la reina de las hadas, son las citas más notables para el público adulto en esta edición. Con una singularidad: este año se establecerá un coloquio con las compañías al término de cada función en la capital. En otras ediciones, estos encuentros han tenido lugar en el marco de las conferencias, suprimidas este año.

Pese a los recortes y como contrapartida, las Jornadas de Almería -segundas en relevancia en teatro clásico tras Almagro- diversifican su oferta y acentúan dos de los aspectos que las hacen únicas: su vocación educativa y provincial. Las Jornadas de Teatro del Siglo de Oro nacieron en el Departamento de Lengua y Literatura de un centro de Secundaria de Almería y nunca han perdido su carácter docente. El programa incluye funciones infantiles y juveniles, además de una jornada en la que los estudiantes interpretarán fragmentos de conocidas obras en la actividad Clásicos, ¡a escena!.

Una vez que concluyen se siembra la misma duda: su continuidad. Hace una década se apuntó la posibilidad de crear una fundación para evitar su pérdida, que podría llegar antes de cumplir su trigésimo aniversario. "A pesar de las dificultades hemos decidido realizar esta edición por respeto a las compañías, público, patrocinadores y colaboradores, el teatro y la cultura, aunque mi compromiso no irá más allá de esta edición", anunció Ascensión Rodríguez.