La Diputación renuncia a denunciar a Gipuzkoa por el retraso de la AP-1

La diputada foral alavesa de Transportes, Alicia Ruiz de Infante, ha reconocido hoy que no existen “bases jurídicas” para reclamar por vía judicial compensaciones económicas a la Diputación guipuzcoana por los retrasos en la puesta en marcha de la AP-1 que enlaza Eibar y Vitoria y por los que Álava dejó de ingresar cerca de ocho millones de euros.

Echaba el cerrojo de esta manera en el pleno de control de las Juntas Generales a llevar a Gipuzkoa a los tribunales. Pero dejaba abierta la vía política, esa que se ha saldado con años de disputas entre ambas Diputaciones sin resultados positivos para Álava. En la legislatura pasada, en 2008, el entonces teniente de diputado general, el peneuvista Claudio Rodríguez, pidió una compensación económica a Gipuzkoa por los retrasos, a lo que sus homólogos de esta segunda provincia, por aquel entonces también del PNV, rechazaron pagar a Álava.

Si el presupuesto inicial fue de 632 millones de euros, 510 correspondían al tramo de Gipuzkoa, que finalizó en 2009, diez años después del inicio de las obras, con más de 600 millones de coste final. El tramo alavés se terminó en junio de 2008 y costó 182,8 millones, frente a los 122 calculados para el presupuesto inicial. Eso sí, la diputada foral ha aclarado a los procuradores que “la AP-1 no es un fiasco”.