Protesta en Bilbao contra el archivo de casos por prescripción

La asociación SOS Bebés Robados de Euskadi ha protestado esta mañana por el reciente archivo de cuatro denuncias en Bizkaia por supuestos robos de niños con el argumento judicial de que los casos han prescrito. Varias decenas de personas se han concentrado ante el edificio de los juzgados de Bilbao con pancartas en las que se leía "No más casos prescritos. No queremos caer en el olvido".

Los asistentes también han coreado diversos lemas, entre ellos "Los hijos viven, los casos no prescriben" e "Investigación, no a la prescripción". La portavoz de la asociación en Euskadi, Flor Díaz, ha explicado a los medios de comunicación que estos casos, que se extienden en el tiempo desde los años cuarenta hasta cerca de 2000, "no pueden prescribir". "Nuestros familiares están vivos; queremos saber la verdad y demostrar que esto ha sido un crimen de lesa humanidad", ha añadido.

Díaz ha diferenciado estos archivos por prescripción de otros archivos provisionales por falta de pruebas decididos en Gipuzkoa, ya que en este último caso se puede continuar la investigación y buscar las citadas pruebas. Esta portavoz ha subrayado que presentarán recursos contra los archivos ante la Audiencia Provincial de Bizkaia y que, después, seguirán "adelante y hasta el final, con ayuda o sin ayuda". "Si hace falta iremos a los tribunales de Derechos Humanos", ha enfatizado.

En el acto ha estado presente Maite Berenguer, una niña "apropiada, con documentación falsa", según se ha definido, cuyo caso es uno de los archivados. Siempre según su relato, nació en 1960 en un domicilio particular de Bilbao y recientemente ha descubierto que en su legajo de nacimiento, firmado por una comadrona, consta que su madre de crianza la trajo al mundo, pero su madre "jamás" tuvo hijos, informa Efe.

"Yo creía que era adoptada", ha apuntado, pero no encontró papeles de adopción. Cuando surgió SOS-Bebés Robados buscó su documentación y presentó una denuncia el pasado 18 de febrero, que ha sido archivada al considerar el juez que debía haberla presentado antes de cumplir 18 años. "Con esa edad, yo no sabía nada. Es demencial el archivo de mi caso, porque la comadrona que firmó el legajo está viva y ni siquiera la han citado a declarar", ha resaltado.

También ha participado en la concentración Maite Aira, cuya hermano presentó una denuncia por la desaparición de su hijo, que también ha sido archivada. Ha explicado que su hermano y su novia tuvieron un hijo en el Hospital de Basurto en 1980, cuando ambos eran menores de edad.

"Fue todo muy extraño; la madre no puso ningún interés en ver al bebé, pero mi hermano se empeñó y pudo ver a un niño sanísimo. A los cinco días nos dijeron que había muerto y nadie lo puso en duda, pero no pudimos ver al bebé muerto ", ha dicho.

El nacimiento de este niño no figura en el registro porque, según ha relatado, les recomendaron inscribirlo como muerto con el argumento de que "se iba a morir". "Cada vez tenemos más claro que ese niño salió vivo del hospital",