El PSE incrusta el debate fiscal en la agenda del Parlamento y las Juntas

El Gobierno y el partido que lo sostiene dieron ayer señales simultáneas de no estar dispuestos a moverse del eje del debate político del momento, que han logrado centrar en el modo de sufragar las políticas públicas y en la adecuación o no del modelo institucional del país a ese objetivo prioritario.

En esa línea de insistencia, el PSE-EE presentó ayer, en el Parlamento, una iniciativa que insta a las Diputaciones a que “sin más dilación, activen un plan integral del lucha contra el fraude” y concreten cambios para garantizar que su recaudación fiscal es suficiente para sostener los servicios públicos. Los socialistas llevarán esa misma propuesta a las tres Juntas Generales, cumpliendo así el anuncio que realizó el viernes en la sesión de control el lehendakari. “Es el momento de las Juntas Generales”, dijo Patxi López.

El propio lehendakari sostuvo también el foco fijo en ese debate, al reiterar que no sacrificará servicios esenciales al cumplimiento del déficit, e insistir en que hacen falta más ingresos para mantenerlos y para apoyar a las empresas, de modo que empiecen a crear empleo.

López no duda de que haya formaciones que prefieran un déficit más bajo, aunque sea a ese precio. “Yo no, el Gobierno tampoco. Y cada vez más gente piensa como nosotros”, afirmó. Su intención es “utilizar el déficit público” para dinamizar la economía y lograr condiciones de creación de empleo.

El Gobierno y el PSE tienen el convencimiento de haberse colocado en el lado bueno de este debate y en línea con lo que los gobiernos europeos empiezan a hacer, y así lo recordó el lehendakari: doce de ellos, incluido el español, están pidiendo ya flexibilidad respecto del déficit y los recortes, de modo que les queden recursos estimular el crecimiento económico, ejemplificó.

Esta mismo opción, hecha en Euskadi por el Gobierno de López, se convierte en un elemento de “distanciamiento y diferencia de criterios” respecto de sus socios, por la coincidencia del PNV y el PP. Ayer mismo volvió a darse, en las normas aprobadas para Bizkaia. Los socialistas denunciaron el “pacto ultraconservador” y reclamaron “autonomía fiscal” para el Gobierno vasco y los ayuntamientos, que son los que prestan la mayor parte de los servicios.

Pastor no mostró preocupación por la alta probabilidad, que admitió, de ver derrotada la iniciativa, igual que el jueves pasado tumbaron PNV y PP la propuesta de lucha conjunta contra el fraude. El texto presentado ayer la incluye de nuevo.

“Hay que ingresar más” admite el diputado general de Gipuzkoa

“Hay debates que se ganan en una votación y otros que se ganan en la opinión pública”, dijo. Esa afirmación apunta a que esta última, y la de forzar una y otra vez la foto de PNV y PP unidos, es la apuesta del PSE. De ahí la insistencia, basada también en el convencimiento del lehendakari de que su posición está cuajando en la sociedad. López deseó que “cale” también en estas dos formaciones políticas, con responsabilidades de gobierno, tanto la renuncia al “recorte por el recorte” como la necesidad de generar más ingresos con la fiscalidad.

El diputado general de Gipuzkoa, a su vez, coincide con el planteamiento del Gobierno: “El camino no pasa solo por el recorte, hay que ingresar más; si no, llegaremos a niveles de endeudamiento imposibles”, dijo ayer Martin Garitano. También aceptó que las Diputaciones “sí son responsables de la recaudación”, y, por tanto, “en alguna medida” de su descenso, pero rechazó el total de la culpa. Las empresas cierran o tributan menos y otro tanto ocurre con los particulares, justificó.