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Iberdrola afianza su anclaje a Euskadi

Sánchez Galán se compromete en presencia del Rey a mantener en Bilbao la sede de la eléctrica, sus centros de decisión en España y la independencia de la empresa

Pedro Gorospe
Los Reyes descubren la placa inaugural de la Torre Iberdrola junto a Sánchez Galán. A la derecha, el 'lehendakari' López.
Los Reyes descubren la placa inaugural de la Torre Iberdrola junto a Sánchez Galán. A la derecha, el 'lehendakari' López.SANTOS CIRILO

Iberdrola y Bilbao se prometieron ayer ante el Rey una relación duradera. La inauguración de la torre que lleva el nombre de la quinta eléctrica del mundo, nacida el 2 de noviembre de 1992 como resultado de la fusión de Hidroeléctrica Española e Iberduero, afianzó aun más si cabe la relación entre la capital de Bizkaia y la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán.

Élite política e industrial

Acompañaron a los Reyes y al lehendakari algunos de los más destacados representantes de la élite política e industrial vasca.

Además del ministro de Industria, José Manuel Soria, entre las 400 personas que se citaron en el atrio de la torre estuvieron la presidenta del Parlamento, Arantza Quiroga; los diputados generales de Bizkaia y Álava, José Luis Bilbao y Javier de Andrés, respectivamente; el alcalde bilbaíno, Iñaki Azkuna; los miembros del Consejo de Iberdrola; el presidente de Confebask, Miguel Ángel Lujua; el de la Corporación Mondragón, José María Aldecoa, o el de Gamesa, Jorge Calvet. A ellos se sumaron, entre otros muchos, el seleccionador nacional, Vicente del Bosque —miembro del Consejo Consultivo de la eléctrica en Castilla y Léon—; el presidente del Superior, Juan Luis Ibarra; el fiscal superior, Juan Calparsoro; los rectores de la UPV, Iñaki Goirizelaia, y Deusto; Jaime Oraá, los exlehendakaris Carlos Garaikoetxea y José Antonio Ardanza; el líder del PP vasco, Antonio Basagoiti, su homólogo del PNV vizcaíno, Andoni Ortuzar o el portavoz del PSE, José Antonio Pastor.

En un acto ante 400 invitados que presidieron los Reyes, Galán tuvo palabras de agradecimiento para la Familia Real, —por apoyar el proyecto desde hace más de un siglo— y para los “valientes empresarios” vascos que “impulsaron un proyecto industrial sin precedentes”. El ingeniero Juan de Urrutia lideró Hidroeléctrica Española, que se convirtió en Hidroeléctrica Ibérica, y el empresario Horacio Echevarrieta tuvo un papel destacado en Iberduero, la otra pata de la futura Iberdrola.

Galán respondió a esos apoyos reforzando el compromiso de su empresa con Euskadi —le escuchaban atentamente el lehendakari, Patxi López, y buena parte de su Ejecutivo— y con España. En el único discurso del acto inaugural, recalcó que la Torre Iberdrola —el techo de Euskadi, con sus 165 metros— simboliza “las hondas raíces y el anclaje de Iberdrola” al País Vasco, pero también “el firme deseo de mantener” sus centros de decisión en España.

El compromiso cobra especial relieve por su dimensión. Sus 33.000 empleados repartidos en más de 40 países y sus más de 30 millones de clientes le han convertido en el primer grupo energético español por capitalización, líder mundial del sector eólico, y una de las mayores eléctricas globales. Y lo ha logrado defendiéndose incluso de intentos de compra. En febrero de 2008, el Ejecutivo vasco pidió a la empresa que mantuviera sus centros de decisión en Euskadi ante los insistentes rumores de un posible acuerdo entre Electricité de France (EDF) y la constructora ACS para comprar la compañía.

Galán recalcó que bajo su mandato Iberdrola seguirá siendo una empresa “independiente, global, española y con sede social en Bilbao, tal y como fue concebida por sus fundadores”.

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Para Bizkaia y para Euskadi, la eléctrica resulta una pieza vital. Aporta el 2% del PIB vasco e ingresa directamente en las arcas forales una media de 550 millones de euros cada año en tributos. Junto a ello arrastra a una buena parte del tejido industrial.

Cerca de un centenar de manifestantes que reclamaban el cierre de la nuclear de Garoña, la república y diversas reivindicaciones laborales se concentraron frente a la torre sin incidentes. Otro numeroso grupo de ciudadanos vitoreó a los monarcas.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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