El pregonero, la llave y la alcaldesa

El cineasta Santiago Segura ha improvisado esta tarde un pregón breve e informal con el que, en presencia de una aparentemente divertida alcaldesa, Ana Botella, ha comenzado la fiesta de Carnaval en Madrid. “Las fuerzas vivas nos invitan al recorte, pues yo invito al exceso. Un poquito pa’ joder”, había proclamado el actor y director.

Exceso, “pero sin romper el mobiliario urbano”, ha exclamado en su discurso, antes de recibir una enorme llave de la ciudad. Dos pasacalles han recorrido el centro hasta el escenario montado en la plaza de la Villa para celebrar una festividad inspirada este año en lo “monstruoso” a partir de los bestiarios de orden mitológico o mediaval.

Por la noche, espectáculos circenses en la plaza Mayor con la compañía Ale Hop, y mañana desfile y luego baile de máscaras en el Círculo de Bellas Artes. La fiesta cuesta 424.000 euros al Ayuntamiento, a los que hay que sumar 110.000 euros más de patrocinios privados. Segura no ha cobrado “para que no haya problemas y acabar con un ‘quítame allá esos trajes”.