Los trabajadores de Cádiz reciben al ministro de Defensa con protestas
Los empleados de Navantia piden que se cumpla el programa de construcción de buques
Los trabajadores que dependen de la industria vinculada a Defensa han recibido con protestas al ministro Pedro Morenés en su primera visita a Cádiz para reclamar carga de trabajo. La principal movilización la ha protagonizado un grupo de una treintena de trabajadores de los astilleros de Navantia de las plantas de la capital, San Fernando y Puerto Real, que se han encerrado en sus factorías.
Morenés ha presidido en Cádiz la entrega a la Armada del buque de acción marítima Relámpago. Precisamente, la protesta tiene como objetivo principal que, pese a la crisis, se ejecute la orden de construcción de cuatro barcos más de este tipo, aprobada en septiembre. Este encargo generaría 6.000 empleos hasta 2015.
El expresidente del comité de empresa del astillero de San Fernando, José Antonio Oliva, ha justificado las movilizaciones en la “enorme incertidumbre”. De los trabajadores sobre su futuro. Tras la entrega de hoy, el astilleros de Puerto Real se queda sin actividad.
"Irá ocurriendo lo mismo en el resto de los centros", advierte Oliva, quien reclama también otros contratos para la reparación de buques civiles o militares.
Además del encierro, los trabajadores de San Fernando se han concentrado para demandar actividad en una industria que el pasado año mantuvo 12.000 puestos de trabajo.
También los representantes de la federación estatal de Industria de CCOO está a la espera de reunirse con Morenés para conocer en qué estado se encuentra el proyecto de fabricación de los nuevos vehículos blindados 8x8 para el Ejército español. Este proyecto, que incluye una primera fase de 300 unidades, beneficiaría a la planta de General Dynamics Santa Bárbara de Granada si le adjudican el encargo, que supondría un 30% de actividad y 24.000 horas de trabajo.
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