Industria intenta apaciguar la próxima edición de la Valencia Fashion Week

Mar Casanova, secretaria autonómica de Economía e Industria, ha sentado a la misma mesa a Alex Vidal, responsable de la gestión de Valencia Fashion Week, y a Dolores Cortés, presidenta de la Asociación de Diseñadores de Moda de la Comunidad Valenciana. Un experimento que intenta apaciguar las tensiones que desde hace tres años empañan las relaciones entre los diseñadores valencianos.

Alex Vidal ha gestionado las últimas ediciones de la Valencia Fashion Week con una asignación directa del Impiva que llegó a dos millones de euros en virtud de una curiosa fórmula de subvención nominal que admite la legislación valenciana.

Su gestión del evento ha provocado que nombres como Francis Montesinos, Hannibal Laguna o la propia Dolores Cortés hayan optado por renunciar a desfilar en el escaparate valenciano.

La próxima edición de Valencia Fashion Week arranca el próximo 15 de febrero. La convocatoria de Casanova apunta a un intento de apaciguar los ánimos entre los diseñadores enfrentados antes del próximo evento.

Fuentes vinculadas al mundo del diseño sugieren que Casanova pretende unificar a los dos grupos de diseñadores, los alineados con Vidal y con Cortés, respectivamente.

"Nuestro objetivo es que un sector como la moda, que ejerce un efecto tractor sobre otros sectores y es un escaparate de la imagen de modernidad y diseño que quiere dar la Comunidad Valenciana, cree sinergias para poder afrontar con éxito la actual crisis económica", ha manifestado Casanova. Sin embargo, las mismas fuentes sugieren será muy difícil superar las diferencias entre ambos sectores.

Economía prevé destinar este año 534.450 euros en ayudas al diseño de moda, que se repartirán al 50 % entre la Asociación Semana de la Moda y la Asociación de Diseñadores de Moda.