![Tres mujeres llevan bidones llenos de agua desde un pozo hasta sus hogares en el campo de refugiados Rhino Camp, en Uganda.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/IHLA6YRVVYKGG6VGPMHNXQRXYU.jpg?auth=d8ed21fc4fb77266017fe202f55e0e0ebd94129a4936e79b998aaec57f5f9008&width=414&height=233&smart=true)
El país pobre con fronteras abiertas para los refugiados
Uganda mantiene una política de acogida única. Un modelo, con sus luces y sombras, que deriva en proyectos de integración con los que la población local también se beneficia. Visitamos el asentamiento de Rhino Camp, un ejemplo