Un pasaporte para todos los puertos

Una población mayor que la de Valladolid, pero originaria de más de ochenta países, tendrá a partir de finales de julio un único pasaporte, con el que podrá transitar por la mayor parte de los Estados; eso sí, siempre que tengan costa y puerto. El origen de este novedoso salvoconducto marino hay que buscarlo en Panamá.

El sistema permitirá comprobar en cinco segundos la identidad del marinero y seguir sus movimientos

Este país centroamericano tiene la mayor flota del mundo. Cerca de 11.000 barcos surcan los mares bajo bandera panameña, dadas las facilidades que ofrece la Autoridad Marítima de Panamá. Pero esa inmensa flota acarrea también un enorme problema: la acreditación y el control de toda una población de 400.000 marineros que navegan bajo esta bandera de conveniencia.

Los marineros proceden de casi todos los países -curiosamente, apenas 300 son panameños-, aunque muchos son originarios de Filipinas, Egipto, Indonesia, Bangladesh, India y otros Estados pobres. Cada vez que un barco emprende su ruta o atraca en un puerto se pone en marcha un intrincado proceso burocrático para acreditar la identidad de los marineros, su homologación profesional o los visados para su estancia en el país.

Para aligerar los trámites, se creó una licencia especial para todos estos marineros, pero el documento era tan rudimentario y tan fácil de falsificar que, más que ser una solución, ha agravado el problema porque se ha convertido en una vía de fraude, obligando a las autoridades portuarias a redoblar sus esfuerzos de control.

Con el fin de solventar este conflicto, que amenazaba la primera industria de Panamá, se convocó un concurso público internacional bajo el amparo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para conseguir un documento de identidad que reuniera todos los mecanismos de seguridad más avanzados. El concurso lo ganó la empresa española Indra, responsable, entre otros muchos proyectos, del nuevo DNI electrónico o del recuento de las elecciones generales y locales.

Tras un año de elaboración, la firma española ha creado el "pasaporte marino", un documento a prueba de fraude para todos los marineros bajo bandera panameña, que incluirá fotografía digital, firma electrónica y huellas dactilares digitalizadas, junto a una libreta de alta seguridad, como la de cualquier pasaporte de curso legal, con más de 20 medidas de seguridad.

"Es imposible de falsificar. Incorpora, por ejemplo, una marca de agua digital por la que se inserta de forma oculta el nombre y el número de identificación. Ni siquiera se puede escanear, fotocopiar o crear desde otro ordenador, porque aparecería un texto escondido que alertaría de que es una copia", dice Ángel Lucas, uno de los responsables del proyecto.

El pasaporte ya ha empezado a ser expedido en Panamá y próximamente se emitirá en el resto de delegaciones regionales de la Autoridad Marítima de Panamá, y se podrá recoger en cualquiera de los 64 consulados panameños distribuidos por todo el mundo. Indra facilitará a estos centros y a las autoridades portuarias un maletín con el que se podrá chequear el pasaporte en cualquier lugar.

El sistema permitirá comprobar en apenas cinco segundos la identidad del marinero, controlar sus movimientos. Pero también se sabrá de forma rápida y ágil si los buques navegan con los permisos necesarios o si se han sometido a las inspecciones pertinentes.

Entre otras ventajas, figura la automatización y reducción del tiempo en las gestiones en un 70%, como son la homologación del título que les acredita para trabajar en un barco panameño, la obtención de la licencia del marinero, la homologación de los cursos realizados, y el registro y abanderamiento de buques. Todos los datos se centralizarán en un centro de control en Madrid.

Así que tal vez ahora la despechada amante de la copla de Concha Piquer que iba buscando de puerto en puerto a su marinero de barco extranjero pueda por fin encontrarlo.