Un estudio revela que el 8% de los jóvenes de Zaragoza ven positivas las drogas
Un 40% de los encuestados cree que tomar dos copas no afecta a la conducción
La alta tolerancia de la juventud española con el consumo de drogas es una cuestión que comienza a preocupar a las autoridades sanitarias, cuyos mensajes no acaban de modificar los hábitos de ocio de muchos jóvenes. Si hace unos días se conoció un informe que revelaba que los adolescentes madrileños beben mucho más que otros chavales europeos, hoy, un nuevo estudio, realizado por un hospital de Zaragoza en colaboración con el Plan Nacional contra la Droga, muestra que un 8% de los jóvenes utiliza términos positivos cuando define las drogas.
Otro dato revelador de la encuesta realizada a más de 6.000 alumnos de entre 14 y 19 años de centros de enseñanza de Aragón es que el 40% de los preguntados considera que tomar dos copas y tener "un puntillo" no afecta a la conducción.
Los responsables del estudio han analizado las respuestas de los jóvenes y han concluido que este colectivo no es consciente del riesgo que suponen las drogas y el alcohol y la necesidad de que cuando se advierte de los peligros de su consumo se reconozca que en un primer momento pueden dar satisfacción, pero son "un falso amigo" con un "riesgo oculto".
Juan Antonio Cobo, director de la Clínica Médico Forense de Zaragoza, ha señalado que el estudio invita a los jóvenes a que digan cuáles son las primeras palabras que les vienen a la mente cuando se habla de drogas. Así, un 8% de ellos define las drogas con tres palabras que poseen un contenido positivo, agradable, festivo o lúdico, un 54% ve las consecuencias negativas de su consumo "con efecto trágico o de riesgo", y un 38% valora las drogas utilizando simultáneamente términos negativos con otros positivos.
Con "un puntillo" se puede conducir
Además, 1 de cada 3 jóvenes de 15 y 16 años no ve peligro en el consumo de alcohol, si bien al comprobar sus efectos, el 73% de los de 19 años percibe la sensación de peligro, aunque 3 de cada 20 encuestados cree que es imposible morir en una borrachera y 4 de cada 10 consideran que con "un puntillo de dos copas" se puede coger el volante.
Tampoco la cocaína es vista como un peligro. El balance que arrojan las respuestas sobre la posibilidad de conducir tras consumir una raya refleja que uno de cada cuatro jóvenes de 14 años lo cree posible y sin consecuencias, y lo que es "peor" es que cuando se empieza a conducir (18 y 19 años) este porcentaje sube hasta un 33% (tres de cada diez jóvenes).
Lo mismo ocurre con el consumo de cannabis. Tres de cada diez jóvenes de 14 años creen que se puede conducir tras fumar un porro sin problemas, porcentaje que se duplica a los 18 años (6 de cada 10), pero que desciende a los 19 años.
