_
_
_
_
CRISIS ARGENTINA

El ex presidente Menem confirma que será candidato en las elecciones de 2003

El presidente provisional Adolfo Rodríguez Saá suspende el pago de la deuda y anuncia medidas populares para crear un millón de empleos

El ex presidente argentino Carlos Menem, que dirigió el país entre 1989 y 1999, ha confirmado hoy en Santiago de Chile que se presentará como candidato a la presidencia argentina en las elecciones que se celebrarán en el año 2003.

Durante una entrevista para el Canal 13 de Santiago de Chile en presencia de su esposa, la ex Miss Universo Cecilia Bolocco, Menem ha sido preguntado si tiene intención de ser candidato a la presidencia en 2003, y ha respondido que "sí, seguro".

Más información
Los peronistas convocan elecciones presidenciales en Argentina para marzo
El estallido social en Argentina obliga a dimitir al presidente De la Rúa
El candidato peronista amenaza con no pagar la deuda externa
Claves:: Diez preguntas sobre la crisis
Galería fotográfica:: Estallido social en Argentina

Menem no se presentará a las elecciones que se celebrarán el próximo 3 de marzo en las que se elegirá al presidente que regirá los destinos del país hasta el 2003, fecha en la que debía producirse la salida del dimitido Fernando de la Rúa.

Menem se ha mostrado esperanzado de que Argentina supere pronto los problemas que vive actualmente, inmerso en una enorme crisis económica y financiera que ha provocado la movilización de la población, que la semana pasada protagonizó una oleada de saqueos y enfrentamientos que sumieron al país en el caos, que provocaron la dimisión del ex presidente Fernando de la Rúa y que se saldaron con más de una veintena de muertos.

El nuevo presidente de Argentina, el peronista Adolfo Rodríguez Saá, elegido hace dos días, anunció en su discurso de toma de posesión, después de jurar su cargo, que el país suspenderá el pago de su deuda externa, que asciende a 132.000 millones de dólares (117.000 millones de euros). Es el pago de la deuda el mayor de los problemas de Argentina, ya que se lleva buena parte de su PIB.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Saá aclaró que la suspensión de los pagos de la deuda exterior no significa "repudiar" los compromisos contraídos, con lo que dejó entrever que buscará una renegociación con reducción de capital, mayores plazos y menores tasas de interés.

El hombre que durante los últimos 18 años gobernó en la provincia de San Luis, confirmó también la vigencia del esquema de Convertibilidad que desde hace más de diez años mantiene iguales valores para el peso y el dólar estadounidense.

Los fondos destinados al pago de la deuda serán utilizados para un plan de creación de empleos que espera llegar a un millón antes de que se convoquen elecciones en el mes de mazo.

Rodríguez Saá prometió también "máxima austeridad" en la gestión de la administración pública, al punto que ha ordenado bajar los salarios de los funcionarios hasta un máximo de 3.000 pesos (o dólares) y la venta de los automóviles y los aviones en poder del Gobierno.

También ha promovido el nacimiento de una "tercera moneda, [el argentino] más allá del peso y el dólar", para aumentar la cantidad de billetes en circulación y pese al riesgo de su depreciación. Esta medida tiene como fin poner más dinero en los bolsillos de los argentinos para reactivar un tanto la maltrecha economía del país.

Un millón de puestos de trabajo

Adolfo Rodríguez Saá centró parte de su discurso en las medidas sociales que tiene previsto emprender para evitar nuevas revueltas y saqueos en las calles del país.

"Lo social es el más grave problema de Argentina, es el desafío que nos presenta el mundo globalizado de nuestro tiempo. El capitalismo, tal cual se nos presenta hoy, no puede dar respuesta al desempleo, la marginación, la exclusión y la pobreza", dijo.

Saá añadió que "desde esta jornada los argentinos nos exigen un cambio, una respuesta, que el centro de la preocupación del Gobierno sea la cuestión social. Venimos a aceptar el desafío".

El anuncio más importante en este sentido ha sido la creación de "un millón de puestos de trabajo" y un "plan alimentario", porque "no se puede concebir que un país con todas la posibilidades de alimentos tenga un pueblo con hambre".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_