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DIPLOMACIA

Arabia Saudí rompe sus lazos con Kabul y aísla aún más al régimen talibán

El Gobierno afgano sólo mantiene ya contactos diplomáticos con Pakistán, que advierte de los riesgos de derrocar al gobierno afgano

El régimen talibán ha perdido uno de los pocos apoyos que le quedaban, Arabia Saudí, que había mostrado cierta reticencia a implicarse totalmente en la coalición liderada por EE UU. El país árabe, el único que reconocía el Gobierno afgano junto con Pakistán, ha roto todas sus relaciones, según se ha informado hoy a través de un comunicado oficial.

"Porque el Gobierno talibán no prestó atención a todos los intentos hechos por el Reino de Arabia Saudí para persuadirle de que deje de albergar criminales y terroristas, el Ejecutivo saudí anuncia que rompe sus relaciones con ellos", explica el comunicado oficial.

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Arabia Saudí "deplora" que la milicia de los talibán "haya hecho de su territorio un centro de acogida, formación y movilización de un número de descarriados de todas las nacionalidades, particularmente de ciudadanos saudíes para que preparen sus actos criminales contrarios a todas las religiones, negándose a entregar a estos criminales a la justicia".

Muestra de esa ruptura de relaciones ha sido la orden que ha dirigido Riad a su cuerpo diplomático para que en las próximas 48 horas abandone Afganistán.

Poco después de que Arabia Saudí anunciase esta decisión, el Gobierno de Pakistán ha reiterado de nuevo que no romperá sus relaciones diplomáticas con el régimen talibán.

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El documento puntualiza, sin embargo, que "el Gobierno saudí mantiene intacto su respaldo a la población afgana".

La medida sigue a la tomada el sábado por los Emiratos Árabes Unidos, que también rompieron relaciones con el régimen de Kabul. Ambos países habían establecido relaciones diplomáticas con los talibán en 1997.

Bin Laden fue expulsado de Arabia Saudí en 1994 después de que injuriara y amenazara a la familia real wahabí por albergar tropas estadounidenses "en suelo sagrado islámico".

Satisfacción de EE UU

El presidente de EEUU, George W. Bush, ha acogido con satisfacción la "inteligente" decisión de Arabia Saudí de romper los lazos con el régimen talibán afgano. "El presidente está agradecido al Gobierno saudí por tomar este paso inteligente", ha declarado el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer.

Estados Unidos mantiene tropas en Arabia Saudí desde que en 1991 lideró la alianza militar internacional que expulsó a Irak de Kuwait, emirato que había invadido en agosto del año anterior.

Decenas de afganos desfilan por las calles de Kabul en furgoneta profiriendo consignas contra EE UU.
Decenas de afganos desfilan por las calles de Kabul en furgoneta profiriendo consignas contra EE UU.REUTER

Las advertencias de Islamabad

El ministro de Exteriores de Pakistán, Abdul Satter, ha lanzado esta mañana dos serias advertencias en la rueda de prensa que ha ofrecido tras entrevistarse con los representantes de la troika comunitaria. Satter ha afirmado que sería "desastroso" imponer un Gobierno desde fuera a Afganistán y ha advertido de que sería una "catástrofe" ayudar a la Alianza del Norte, opositora a los talibán.

"Creemos que apoyar a una parte u otra [en el conflicto interno que vive el país] provocaría grandes sufrimientos para el pueblo de Afganistán", ha declarado el ministro de Exteriores paquistaní. "Los afganos son ferozmente independientes" y todos los que han intentado inmiscuirse en sus asuntos -incluyendo Pakistán- han pagado "un precio muy alto", según Satter.

"Imponer un Gobierno en Afganistán", ha continuado el ministro, "sería un desastre. La población no aceptará un Gobierno impuesto por los extranjeros". Los EE UU confirmaron ayer tener "contactos estrechos" con la oposición al régimen talibán, la milicia fundamentalista en el poder en Kabul.

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