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Tentaciones

Instagram Stories no es para tanto y estos son los motivos

Nuestro 'hater' afirma que Instagram es "el Frankenstein de las redes sociales", hecho con las partes muertas de sus competidores y copiando Snapchat sin escrúpulos

Nos adentramos en los procelosos mares de la tecnofobia. No hay nada tan peligroso para un hater que enfrentarse a las tendencias de la comunicación social sin caer en el cliché "abuelo crítica el móvil". Toca remangarse y realizar un servicio público en contra de la tecnología involutiva. Hace menos de un año Instagram daba una nueva vuelta de tuerca a su funcionalidad e introducía el concepto de Stories, un verdadero caballo de Troya que ha destrozado la experiencia de usuario a los románticos del Instagram original. Pasado el tiempo, aún no lo hemos digerido. Nosotros no odiamos a Instagram; Instagram nos odia a nosotros.

1. HAZME CASITO

Al principio existía una sensación de naturalidad en la propia línea de tiempo de Instagram. El contenido de calidad recibía su correcta dosis de aceptación y todo fluía de manera orgánica. Con la aparición de Stories, los perfiles pasaron a dividirse en dos tipos: los que rechazaron esta nueva funcionalidad y los que aparecen de manera recurrente rodeados en un círculo rojo de misterio para que les hagas casito varias veces al día. Que han ido de vacaciones, que han vuelto de vacaciones, que han cocinado quinoa y que el perro se ha comido un dorito. Eso sin contar los motivadores con textos de Mr. Wonderful o frases de Mandela. El attention seeker ha revivido gracias a Instagram Stories y ha sido validado por el estado de WhatsApp.

2.LA BOLA QUE TODO LO COPIA

El fin justifica los medios en la jungla de Silicon Valley. ¿Aparece una aplicación llamada Vine para crear microvídeos de 6 segundos? La copio y subo a 10. ¿Todo el mundo en Twitter utiliza el DM para comunicarse en privado? Nos saltamos el concepto de lo público, clonamos lo de los mensajes y lo llamamos Instagram Direct. ¿Existe una cosa que se llama Snapchat para crear contenido rápido y efímero? Instagram Stories. ¿Los 10 segundos de vídeo no son suficientes? Aumentamos a un minuto. Instagram se ha convertido en el Frankenstein de las redes sociales, hecho con las partes muertas de sus competidores.

3. APOCALIPSIS SELFIE

Uno recuerda Instagram como la red donde había atardeceres saturados, filtros excesivos, bodegones gastronómicos y, en muchos casos, fotografías muy buenas. Y todo ello sin restar poder a los influencers ni a las marcas. Ahora uno se encuentra con un universo de selfies, encuadres imposibles, stickers de dudoso gusto y una utilización completamente incorrecta de los emojis. La gran amenaza cani se ha hecho realidad en una distopía millennial. Instagram, tú antes molabas.

4. EL BULLSHITTING DEL SOCIAL MEDIA

Gracias a todas estas mutaciones monstruosas, Instagram se ha convertido en el alfa y omega de la nueva publicidad. Su objetivo es generar ruido social para cualquier marca que quiera estar en la pomada. Su continua evolución requiere puesta al día y ahí es donde entra la biblia del social media: "Los 12 trucos para crear contenido que genere seguidores", "Las 6 reglas para exprimir al máximo Instagram Stories", "Crea tu marca personal y que tu cuenta de Instagram eche fuego". Toda la verborragia creada alrededor de esta red es directamente proporcional a la burbuja generada. Nadie se entera.

5. FACEBOOK INVENTA FACEBOOK

Cada vez estamos más cerca de completar el círculo. Cuando Facebook compró Instagram, todos temíamos una absorción dentro de la red nodriza, pero al final su valor estaba en cruzar plataformas de manera muy rentable, a base de añadir indiscriminadamente funcionalidad y herramientas para anunciantes. Eso sí, en cuanto Instagram tenga algo parecido a un muro, Facebook habrá inventado Facebook. De nuevo.

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