Resuelto el misterio de los círculos de hadas de Namibia
Los enigmáticos patrones del desierto son fruto de la interacción entre termitas y plantas
A lo largo de la costa de Namibia (África), la escasa vegetación que crece en el desierto del Namibia forma unos extraños círculos alrededor de calvas en la arena. Conocidos como círculos de las hadas, cada uno de ellos forma además hexágonos con sus vecinos más cercanos. Estos patrones regulares han intrigado durante años a los científicos. Ahora, un estudio publicado en Nature y con participación española, señala a la interacción entre insectos y vegetación como sus creadores.
Estas enigmáticas formaciones toman su nombre de unas composiciones similares que crean varias especies de hongos en la Europa húmeda. En el pasado tenían un halo mitológico, como puertas a un lugar sobrenatural. De hecho, también se los conoce como corros de brujas. En realidad solo se trata del resultado del crecimiento radial del hongo. Los círculos de Namibia aparecen en una de las zonas más desérticas del planeta, así que no pueden ser cosa de unas setas.
De las varias hipótesis sobre su origen, dos son las que más frutos han dado. Una señala a la acción de las termitas que crearía las calvas. La otra dice que es la interacción entre la escasa agua y las plantas lo que crea estos patrones. Durante años los científicos intrigados por estos círculos se han ido agrupando alrededor de estas dos hipótesis consideradas antagónicas: o son las termitas o son las plantas.
"De acuerdo con nuestra teoría, la interacción entre termitas y vegetación es necesaria para poder reproducir las características que se han considerado hasta ahora más importantes de los círculos de las hadas de Namibia", dice el físico especializado en ecología teórica y coautor del estudio de Nature, Juan Bonachela. En su modelo, las termitas crean las calvas con un patrón regular fruto de la competencia entre las distintas colonias por el espacio y los recursos.
Las termitas crean calvas que conservan una humedad aprovechada por las plantas al borde de los círculos
Al eliminar la vegetación, las termitas favorecen la acumulación de agua bajo el suelo arenoso, algo vital para su supervivencia. "El anillo de vegetación alrededor de las calvas, que es en realidad lo que llamamos el círculo de las hadas, es el resultado de que las plantas aprovechan esa acumulación de agua para crecer (y crecer más que la vegetación entre círculos) gracias a un mecanismo por el cual las raíces persiguen estos gradientes de agua", explica Bonachela, actualmente investigador en la universidad escocesa de Strathclyde.
Este modelo teórico lo aplicaron a tres concentraciones de círculos de hadas en Namibia y comprobaron que reproducía con gran exactitud la formación real de los círculos. Además, pudo predecir rasgos de estos patrones que habían pasado desapercibidos hasta ahora, como es la matriz de baja vegetación entre los círculos de hadas. Vieron, además, que las zonas de círculos resistían mejor la sequía y se recuperaban antes al regresar las lluvias. "La competición por el agua entre círculos crea el patrón secundario de pequeña escala, algo que nunca se había documentado en este sistema hasta ahora", sostiene el científico granadino.
Más aún, con las necesarias adaptaciones a las condiciones locales, el modelo que explica los círculos de hadas de Namibia, también podría ayudar a entender cómo se han formado otros paisajes similares, como unos montículos observados en la reserva Masai Mara de Kenia, con la misma distribución hexagonal, los campos de murundus en el Mato Grosso brasileño, los mima de la costa oeste de EE UU o los termiteros del parque nacional Litchfield, en Australia.
"Espero que esta nueva investigación abra los ojos a aquellos que desde 2013 han cuestionado la hipótesis de las termitas y propuesto la contra hipótesis de que los círculos de hadas son creados solo por la auto organización vegetal basada principalmente en la competencia entre las plantas por recursos escasos", comenta el biólogo alemán Norbert Jürgens, el principal sostén de las termitas como ingenieros de los círculos de Namibia.
Desde la otra trinchera, el ecólogo también alemán del Centro Helmholtz para la Investigación Ambiental de Leipzig, Stephan Getzin, sigue descartando a las termitas y defiendo la tesis de la auto organización vegetal: "Mis colegas y yo pensamos que los círculos de hadas son provocados por la competencia por la escasa agua del suelo en Namibia", explica en un correo. Según Getzin, "no hay suficiente agua para sostener una completa cobertura vegetal continua, lo que lleva a un patrón parcheado. Los huecos son la expresión de la falta de agua o la sequía y el extremo grado de ordenamiento está provocado porque el estrés hídrico es igual en todas direcciones".
Pero la debilidad fundamental que le ve al modelo ahora publicado es que los círculos de hadas que su equipo descubrió el año pasado están en una región, el desierto occidental de Australia, donde no hay termitas por lo que, como concluye Getzin, "las termitas no son un requisito previo para la formación de círculos de hadas, aunque en algunas zonas ellas sean abundantes o muestren una correlación con los círculos".
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