Beckham e hijos S.L.
Brooklyn se suma al negocio familiar como portada de una revista masculina Antes, su hermano Romeo fue imagen de Burberry y Harper da nombre a una línea de bolsos
A estas alturas, es evidente que David y Victoria Beckham, además de matrimonio, son un par de socios bien avenidos. Empezaron su andadura como cantante pop y futbolista, pero sus 17 años como pareja les han servido para montar un negocio conjunto incluso más rentable que los individuales: la universalmente reconocible marca Beckham. Ella –dicen- es el cerebro comercial y la mano detrás del look de su marido. Él aporta la accesibilidad y las sonrisas que tanto le cuesta ofrecer a su mujer.
No les ha ido nada mal. Sus tres empresas familiares les proporcionan unos ingresos combinados de unos 120.000 euros al día, según informes difundidos en 2013. La sociedad Beckham Ventures dirige la firma de moda de Victoria, Footwork Productions se encarga de los numerosos contratos publicitarios de David, y la tercera compañía, Brand Beckham, factura las operaciones de la pareja. El matrimonio comparte representante y ha aparecido en varias campañas publicitarias, entre ellas la de sus propios perfumes y la de la línea de ropa interior de Armani.
La marca está en plena expansión, y eso es gracias a sus cuatro hijos. Como era de esperar, los retoños Beckham siguen los pasos de sus padres, abriendo nuevas posibilidades de mercado. Brooklyn, el mayor de los hermanos, acaba de estrenarse en el mundo de la moda. A sus 15 años ha debutado posando para Man about Town, una revista bianual dirigida a urbanitas de gustos caros. El fotorreportaje, que muestra al adolescente con prendas de Saint Laurent y Ralph Lauren contó con el beneplácito de sus padres. David había sido portada de uno de los números anteriores y Victoria ha trabajado en ocasiones anteriores con el fotógrafo, Alisdair McLellan.
El director de la publicación, Ben Reardon, asegura que Brooklyn afrontó con eficiencia y tranquilidad su primera sesión de fotos. Al parecer, ha heredado el físico y la amabilidad de su padre y el “interés por el proceso de estilismo” de su madre. “No desmerece su apellido”, ha declarado el editor. De esta manera, Brooklyn continúa el camino que abrió su hermano Romeo, que a los 10 años protagonizó una campaña para la firma de moda Burberry. Dos años antes, Romeo fue incluido en la lista de hombres mejor vestidos de la revista GQ.
Los dos benjamines de la familia, Cruz y Harper, aún no han hecho su presentación oficial como maniquíes profesionales. Pero sus padres se encargan de que estén más que acostumbrados a los flashes. Con solo dos años y medio, Harper es todo un referente de estilo y va camino de robarle el protagonismo a su madre. Alterna con la directora del Vogue estadounidense, Anna Wintour, en los desfiles y su vestuario es diseccionado por webs dedicadas en su totalidad a ella. Victoria, además, ha querido que su hija pequeña no fuera menos que Jane Birkin o Grace Kelly y sus respectivos modelos de Hermés. Harper ya tiene bolso propio, ya que la exspice decidió bautizar una línea de marroquinería en su honor.
Por ahora, Cruz es el único que parece más interesado en pegar patadas al balón que a dejar su huella en la farándula. Ha fichado para el equipo infantil del Arsenal, el mismo club londinense al que pertenece su hermano Romeo, que juega en una categoría superior. Brooklyn emula a su padre en la división sub-15 del Fulham. El primogénito de los Beckham ya maneja su propia cuenta de Twitter, que actualmente permanece inactiva. Tal y como ha anunciado el niño en su actualización más reciente, ha dejado de tuitear y de entrar en la web ask.fm para cumplir con la Cuaresma.
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