El fin a un silencio de dos años

Desde que, hace dos años, se disolviera el grupo de rock más imbatible del último cuarto de siglo, el cantante Michael Stipe había guardado silencio. El exvocalista de R.E.M. se había mudado a su casa en BerlÌn, a practicar la escultura y empezar una nueva etapa en su vida, lejos de la fama, de los 85 millones de discos que llegó a vender y de la legión de admiradores que aún acumula. Ahora ha roto ese silencio para ICON, la revista masculina de EL PAÍS, a la cual ha concedido una entrevista inusualmente personal en la que reflexiona sobre su futuro ("No descarto volver a los 70, como Leonard Cohen"), su presente y el lugar que ocupa en la historia del rock.

No descarto volver a los 70, como Leonard Cohen

El autor de Losing my religion reconoce que hay mucha gente a la que nunca le gustó su presencia en la banda: "Hay millones de personas que jamás soportaron el sonido de mi voz, un contingente enorme de gente que nos valoraba como escritores de canciones, pero que siempre pensó que con otro cantante la banda hubiese sido mejor". Pese a ello, y pese a que su timidez le supuso sufrir continuamente el hecho de tener que hablar con mucha por su trabajo, asegura que se acostumbró rápidamente a las crÌticas, sobre todo desde que vivió en Nueva York: "Muchas veces se cruzan contigo por la calle, te sueltan una puya y siguen andando. Es muy sano". En la entrevista, Stipe hace también referencia a un tema controvertido en aquellos años de éxito: "Respecto a mi sexualidad, solo pienso decir que, desde que el mundo no es sexualmente binario, me siento mucho más a gusto".

Junto a Stipe, en el segundo número de ICON, que sale mañana y que será gratis con EL PAÍS, figuran también Macarena GarcÌa, actriz protagonista de Blancanieves y la obra La llamada; Giorgio Armani, que recomienda sus lugares favoritos de Milán, y autores como Charlie Brooker, Neil Gaiman o el chef Massimo Bottura, que reflexionan sobre cómo será el mundo del arte en 2014.