China desacelera
La reducción de la tasa de crecimiento es efecto y causa del parón europeo
El crecimiento de la economía china se ha desacelerado. Un 7,6% anual en el segundo trimestre de este año es algo más de lo que se esperaba, pero menos de lo que le hubiera gustado al régimen. Y al resto del mundo. Para cualquier otro país, sería una cifra envidiable. Sin embargo, despierta una cierta preocupación dentro y fuera del país que se acrecienta con las dudas sobre la fiabilidad del dato. Pues la realidad puede ser peor. Los datos de producción industrial y de consumo eléctrico lo avalarían.
Entre 2009 y 2010 el Gobierno chino inyectó en la economía el equivalente al 35% de su PIB, un estímulo nunca visto. Aunque persista en la política de crecimiento, no parece, sin embargo, que esté dispuesto a seguir por esta vía que ha generado una peligrosa burbuja inmobiliaria. Aun así, está actuando a través de los créditos.
En la actual crisis, China y otras economías emergentes han tirado de los países occidentales que crecen poco, cuando no están aún en recesión. China ha frenado su crecimiento porque Europa y EEUU se han parado. Lo que a su vez hace que estas economías puedan exportar menos a unos chinos no tan interesados ahora en coches alemanes de lujo u otros productos europeos. La economía mundial ha entrado en un círculo vicioso de difícil salida. Los problemas chinos están también afectando ahora a otras economías emergentes, muy especialmente de América Latina. Para países como Brasil, Perú y Chile, China se han convertido en un lustro en el primer destino de sus exportaciones. Algunos estudios señalan que una desaceleración de la economía china de un 1% de su PIB repercute en un 1,2% de menor crecimiento en los principales países de América del Sur (México es un caso diferente).
Los propios chinos decían que necesitaban un crecimiento por encima del 8% para la creación de los 25 millones de nuevos empleos anuales que necesita para ocupar a los que se desplazan del campo a las ciudades industriales. Los dirigentes temen explosiones sociales, más aún cuando en noviembre se ha de renovar la cúpula del poder en China, algo de lo que está pendiente el mundo para ver qué política económica seguirá la nueva dirección. De ello depende no solo la suerte de China, sino de buena parte del mundo, incluida una España que se ha quedado atrás en sus relaciones con el gigante asiático.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
La jornada electoral de las elecciones extremeñas del 21D, en imágenes
Alcalá Norte confirma su paso de gigante con un eufórico concierto en Madrid
Elecciones en Extremadura 21D, en directo | Los extremeños comienzan a votar en tras abrir los colegios sin incidentes
La Administración de Trump publica (a medias) los papeles de Epstein: ¿cuáles son las principales novedades?
Lo más visto
- Uno de los promotores de la señal V-16 de tráfico: “Es duro oír el testimonio de víctimas que han sufrido amputaciones al poner los triángulos”
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”
- Cae una organización que enviaba camiones cargados de cocaína desde Marbella hasta varios países europeos
- La policía registra varios domicilios y las oficinas de la ministra francesa Rachida Dati por otro presunto caso de corrupción
- Manuel Castells, sociólogo: “El mundo está en un proceso de autodestrucción”




























































