El 'caso Palma Arena' fuerza la dimisión de la presidenta del PP balear

Los escándalos de corrupción del velódromo Palma Arena han dejado descabezado el PP balear. Rosa Estarás, la presidenta del Partido Popular de las Islas Baleares, ha renunciado a su cargo en mitad del proceso judicial que investiga un supuesto desfalco millonario en la construcción de la obra estrella del gobierno del ex presidente Jaume Matas. La dimisión se produce apenas dos semanas después de que el caso de corrupción se cobrara su primera víctima política, Rafael Durán, portavoz del PP de Palma y a quien Rosa Estarás había ratificado en su cargo 15 días antes de su dimisión.

Estarás ha aducido motivos de salud, según han informado fuentes del partido. Sin embargo, la sombra del Palma Arena planea sobre la ya ex presidenta popular. Varios de sus colaboradores implicados en la trama corrupta han realizado ante el juez que instruye el caso, José Castro, declaraciones poco favorables a Estarás, según fuentes de la investigación.

Vicepresidenta de Baleares durante los dos gobiernos de Jaume Matas, Estarás ascendió a la presidencia del partido en las islas tras la huida política de Matas en junio de 2007, ante la llegada de los socialistas al gobierno balear. Estarás obtuvo entonces el 30% de apoyo en el congreso celebrado para elegir al nuevo líder y se convirtió en la jefa de la oposición. Renunció a este cargo cuando, por sorpresa, su nombre apareció en las listas del PP en las últimas elecciones europeas, aunque no abandonó el liderazgo del PP balear, para dirigirlo a distancia "con las nuevas tecnologías" y "triplicando" el esfuerzo, afirmó entonces.

El escándalo en Baleares estalló tras un año de rastreo del juez José Castro y de los fiscales anticorrupción Pedro Horrach y Juan Carrau, que indagan el supuesto despilfarro de millones de euros por desvíos a particulares, con sospechas de financiación electoral del PP, en la construcción del macrovelódromo Palma Arena. El edificio casi triplicó su coste: de 41 a 110 millones.

Desde que a primeros de agosto se produjeron las primeras detenciones de varios implicados en la trama corrupta la justicia ha ido estrechando el cerco al PP balear con las imputaciones de una docena de sus colaboradores y ex altos cargos del Gobierno del ex presidente Jaume Matas entre 2003 y 2007. Rosa Estarás defendió entonces la gestión del PP y ratificó a Rafael Durán en su cargo, tan sólo 15 días antes de su dimisión.