Guipúzcoa ultima con los bancos la financiación de su incineradora
Los créditos supondrán el 66% de los 382 millones del proyecto de Zubieta
Dos terceras partes del coste del futuro Centro de Gestión de Residuos de Zubieta, que incluye una incineradora y está estimado en 382 millones de euros, se financiarán mediante sendos créditos que se contratarán con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y dos entidades bancarias privadas. El Consorcio de Residuos de Guipúzcoa, la entidad que agrupa a la Diputación y las mancomunidades de basuras, ultima con los bancos las condiciones económicas de los préstamos y confía en cerrar los acuerdos a finales de este mes. Una vez lograda esa garantía financiera, el consorcio podría aprobar a comienzos de febrero la adjudicación provisional de la construcción de la polémica planta de combustión.
La adjudicación del proyecto podría darse a comienzos de febrero
Guipúzcoa afronta de esta manera la recta final de la tramitación administrativa, previa al inicio de los trabajos de ejecución del centro que albergará todas las infraestructuras para gestionar las basuras de todo el territorio, incluida la incineradora. La apertura del complejo de Zubieta, en terrenos de San Sebastián aunque más próxima al núcleo de Usurbil, se prevé para el año 2013, fecha en la que se procedería al cierre de los tres vertederos que siguen aún abiertos en Beasain, Azpeitia y Zarautz.
Como paso anterior a la adjudicación del proyecto constructivo y la gestión de la incineradora, al que aspiran dos grandes grupos empresariales, el Consorcio de Residuos de Guipúzcoa quiere atar el modelo de financiación de la inversión total. Esta entidad pública aportará 127 millones de euros -principalmente de los presupuestos de la Diputación guipuzcoana- y el resto se sufragará vía créditos. La línea de préstamo con el Banco Europeo de Inversiones ascenderá a 195 millones y otros 60 millones se contratarán con la banca comercial (Banesto y La Caixa), según fuentes del Ejecutivo foral. Responsables del consorcio vienen celebrando reuniones en las últimas fechas en Madrid para fijar las condiciones de los citados préstamos a largo plazo. Los contratos con las entidades bancarias podrían formalizarse a finales de este mismo mes.
El siguiente trámite consistirá en la designación del grupo empresarial que asumirá la ejecución de las obras y la gestión de la planta de combustión durante los cinco primeros años de funcionamiento. De las tres UTE (unión temporal de empresas) que se presentaron al concurso público, finalmente son dos las que mantienen sus ofertas, dado que la tercera fue rechazada por no haber acreditado su capacidad para afrontar un proyecto de este calado.
La pugna se ha quedado entre el grupo formado por FCC, la multinacional austriaca la multinacional austriaca AE& E Inova AG, Altuna y Uría, Murias y Zerbitzua, y la alianza que integran Befesa, Novergie, la división de energía de Thyssengrupp, Galdiano y Antzibar.
El precio de licitación se eleva a 223,3 millones de euros para construir la incineradora y el resto de instalaciones, como una planta de pretratamiento biológico mecánico y otra destinada al tratamiento de aguas y efluentes. El contrato incluye asimismo la concesión de 49,9 millones por los cinco primeros años de la gestión de estas infraestructuras, que podrían prorrogarse otro lustro por otros 53,2 millones. Según el pliego del concurso, la adjudicataria contará con tres meses de plazo para presentar el proyecto básico y otros nueve para elaborar el constructivo e iniciar las obras.
En la actualidad ya se están acometiendo los trabajos para construir, por un montante de 4,2 millones, los viales que darán acceso tanto al centro de residuos de Zubieta, como a un futuro polígono industrial y al centro penitenciario que está proyectado en este entorno
Un debate apaciguado
El fin de la tramitación administrativa cierra una larga historia de discusiones y polémicas sobre la elección del mejor modelo de tratamiento y eliminación de sus residuos urbanos (casi medio millón de toneladas al año) para Guipúzcoa. El encendido debate que comenzó en 2003, cuando San Marcos decidió construir la incineradora en Urnieta, se apaciguó en febrero de 2007 tras la decisión del Ayuntamiento donostiarra de erigirla en los terrenos de Arzabaleta, junto a Usurbil.
En este emplazamiento montañoso se construirá el Centro de Gestión de Residuos, conformado por dos instalaciones principales, la incineradora y una planta de pretratamiento biológico mecánico o biosecado que reduce en un 30% la materia orgánica. Los responsables del Consorcio de Residuos aseguran que la planta de combustión de basuras será de última generación y estará dotada de los mejores avances tecnológicos.
El proyecto, que ya recibió el año pasado el visto bueno ambiental del Gobierno vasco, contempla su puesta en marcha a lo largo de cuatro fases, la primera de las cuales consistirá en el diseño e ingeniería del centro; la segunda corresponderá a la construcción y montaje de la planta; la tercera será la puesta en marcha y comprobación de las condiciones de seguridad, y la cuarta se refiere al mantenimiento y operatividad de las instalaciones durante los cinco primeros años.
Este modelo de gestión cuenta con la contestación de los grupos ecologistas y de varios partidos políticos en Guipúzcoa: ANV-Batasuna, Aralar, EA, EB y Alternativa. Son partidarios de aplicar el modelo de recogida de la basura puerta a puerta que ya viene practicándose en Usurbil, Hernani y Oiartzun. Pero los responsables forales consideran que la participación ciudadana en estos pueblos, después de una implicación notable en su inicio, ha ido aflojando el compromiso con la separación de las distintas fracciones de la basura. Y también constatan que la calidad de la materia orgánica que se está recogiendo en estos municipios no es de buena calidad.
Estos tres municipios, gobernados por ANV, tenían la intención de extender el sistema puerta a puerta a otros puntos de Guipúzcoa. Llegaron a plantear la posibilidad de ponerlo en práctica en una localidad pequeña como Antzuola, aunque por el momento la iniciativa no ha cristalizado.
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