_
_
_
_
_
Reportaje:Las consecuencias del temporal

Aulas a medio gas, Retiro lleno

Los colegios de la Comunidad abrieron, aunque no impartieron clases - El parque más céntrico se llenó de estudiantes en busca de diversión

El teléfono no da tregua. "Colegio Carretas, dígame", responde el director, Antonio Claret. "Sí, está abierto, pero no damos clase", repite una y otra vez en su despacho. El colegio público, en una de las calles que sale del Ayuntamiento de Arganda del Rey, permanece en un extraño silencio. No se oyen gritos infantiles ni carreras. El patio está cubierto de nieve, con las porterías vacías. Apenas hay 40 niños en un colegio para 400. "Han venido muy pocos, muchos padres han pensado que estábamos cerrados", explica Claret.

La Comunidad suspendió las clases ayer por el temporal. Muchos lo interpretaron como un día de puertas cerradas, según explicaron los directores de varios colegios y algunos padres que fueron a los parques a jugar con sus hijos. Casi todos los centros de Madrid recibieron a los estudiantes desde por la mañana en el primer día de clase tras las vacaciones de Navidad. Hubo 17 colegios (de los 2.100 centros públicos de Madrid) que no abrieron porque los maestros no llegaron a tiempo por problemas en los accesos, según la Consejería de Educación. Unos 3.000 niños se quedaron literalmente sin colegio por las fuertes nevadas, principalmente en el este y el sur de la región. Y otros muchos (ayer se incorporaban cerca de un millón de escolares de Infantil a Secundaria) no acudieron aunque sus centros estuvieran abiertos.

Los centros funcionarán hoy con normalidad, según Educación
Más información
Una lección casi aprendida

"Me los he llevado porque no nos garantizaban el comedor", explica Alicia Aparicio, de 41 años, junto a una plaza de San Fernando de Henares. Llevó a sus dos hijos al colegio público Ciudades Unidas por la mañana, cuando la directora aún no podía garantizarle que las cocineras y el camión de la comida llegarían a tiempo. Su hija Lorena, de cinco años, sí que quería ir a clase. O al menos eso asegura con el rostro pegado al brazo a su madre: "Es que a mí me encanta". Aparicio tuvo que pedir el día libre en su puesto de administrativa. "Mis jefes lo han entendido bien, tenía que cuidar de mis hijos", dice.

En el colegio Guernica, también en San Fernando, acudió a clase un centenar de los 452 alumnos del centro. Jugaron a colorear y a moldear plastilina, según la directora, Marisol Montero. Nada de patio ni de tirarse bolas de nieve unos a otros. "Es que si se mojan no tenemos muda para ellos", explica Montero.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Los que sí disfrutaron de las guerras de nieve fueron los centenares de niños ociosos que aprovecharon el día extra de vacaciones en el parque del Retiro. A la hora de comer, la pequeña Mya, de siete años, todavía ultimaba los detalles de su gigante muñeco de nieve, mientras sus padres, bolivianos en paro, añadían un toque personal al inanimado: un cartel pidiendo limosna. A pocos metros, un grupo de cinco chavales con mocasines huía, entre gritos, después de que dos guardias de seguridad del parque los regañaran. Según los chicos, de 13 años, un señor se quejó de lo que ellos veían normal: "Tirar bolazos de nieve a los patos". Más discretas, pero con la ropa empapada, un grupo de chicas de 2º de Bachillerato del colegio Jesús María se despedía tras una intensa guerra de bolas. "Hay que rezar para que nieve también mañana", proclamaba una. No dio resultado si lo hicieron. Un portavoz de la Consejería de Educación aseguró que hoy vuelven a abrir los centros escolares y está previsto que se den las clases con normalidad.

La nieve complicó también las clases de los alumnos mayores. Tres de las seis universidades públicas de la Comunidad (Alcalá, Autónoma y Rey Juan Carlos) retrasaron las clases y los primeros exámenes, informa Europa Press.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_