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"Sí, me siento integrado"

Un estudio destaca la adaptación de los trabajadores extranjeros

Ángeles Lucas

"Sí, me siento integrado en la sociedad", declaran los inmigrantes que trabajan en Andalucía. Es uno de los datos que refleja la investigación realizada por la Federación Andalucía Acoge y la Consejería de Empleo publicada en el volumen Iceberg. Estudio del proceso y evolución de la vida laboral de personas extranjeras no comunitarias en Andalucía que se presentó ayer en Sevilla.

La presidenta de Andalucía Acoge, Manmen Castellano, resaltó que la crisis está afectando con mayor incidencia a la población inmigrante, que supone el 7% de las afiliaciones registradas en la región. "Trabajaban fundamentalmente en la construcción y los servicios, los sectores más castigados. Además, no tienen redes sociales de apoyo y aumenta la precarización de sus condiciones laborales".

Las coordinadoras del trabajo, Alicia Fernández y Sara López, describieron que el estudio está realizado con entrevistas y cuestionarios a extranjeros no comunitarios y autóctonos residentes en Andalucía, "para poder comparar ambas experiencias, lo que ha resultado muy enriquecedor", comentan. Además, la publicación incluye un segundo volumen con valoraciones de grupos políticos, sindicales y empresariales.

Una de las conclusiones destacadas ha resultado que España se convierte en un lugar de destino para vivir y trabajar sin ser el objetivo de los inmigrantes. "Antes de venir, ellos concebían el país como un lugar de tránsito, pero después se quedan". "También vemos sin lugar a dudas que el principal recurso de búsqueda de empleo para ellos es mediante sus redes de contactos", dice Fernández.

El estudio revela también que, durante esta crisis, los inmigrantes presentan más sus currículos a las empresas en persona que los autóctonos. "Ellos van directamente a entregar sus autocandidaturas y buscan insistentemente. Los de aquí prefieren utilizar Internet y focalizan la búsqueda donde saben que hay puestos", agrega.

El doctor en Antropología social y participante del estudio Miguel Pajares consideró ayer que en España crece ahora la sensación de que sobran los inmigrantes. "Pero hemos tenido la inmigración que hemos necesitado y cuando la hemos necesitado. Y vamos a seguir necesitándoles, sobre todo cuando empiecen las jubilaciones de la generación baby boom de los años 60. Quizás el retorno no sea tan bueno, lo que hay que hacer es invertir en su formación para que estén cualificados y con los mismos derechos laborales que los autóctonos", concluyó.

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Sobre la firma

Ángeles Lucas
Es editora de Sociedad. Antes en Portada, Internacional, Planeta Futuro y Andalucía. Ha escrito reportajes sobre medio ambiente y derechos humanos desde más de 10 países y colaboró tres años con BBC Mundo. Realizó la exposición fotográfica ‘La tierra es un solo país’. Másteres de EL PAÍS, y de Antropología de la Universidad de Sevilla.

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