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Aído: "Desde la viabilidad fetal no cabe el aborto, haya o no anomalías"

Mónica Ceberio Belaza

A partir de la semana 22 sólo podrá interrumpirse el embarazo en caso de anomalías incompatibles con la vida del feto, según la reforma de la normativa sobre el aborto que está preparando el Gobierno. "Desde la viabilidad fetal no cabe la interrupción del embarazo", señaló ayer la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, tras su reunión con el presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI). Esta declaración, en línea con lo dispuesto en el informe del comité de expertos, suscitó algunas dudas sobre qué ocurrirá a partir de ahora con la detección tardía de malformaciones fetales -pasadas las 22 semanas-, una de las grandes lagunas de la ley actual que ha llevado a un buen número de españolas a tener que desplazarse a Francia para abortar.

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Las malformaciones se detectan normalmente antes de este plazo, pero no siempre. Sólo en Cataluña, el Departamento de Salud calcula que cada año hay al menos 50 casos de anomalías graves de las que los médicos tienen noticia de forma tardía. En Francia, donde las mujeres pueden abortar de forma libre durante las primeras doce semanas de embarazo, se permite la interrupción del embarazo en cualquier momento si peligra la salud de la mujer o hay riesgo de que el niño sufra una grave o incurable enfermedad. Para evitar abusos, debe autorizarlo un comité médico formado por varios especialistas. Si finalmente la ley española recoge la fórmula de permitir el aborto sólo en los casos de "incompatibilidad del feto con la vida", podrían quedar fuera algunos supuestos en los que el feto no va a morir nada más nacer pero sufre de graves e incurables patologías.

"La ley va a dar respuesta a absolutamente todos los problemas en los que se puede encontrar una mujer embarazada", afirmó ayer Isabel Martínez, secretaria general de Políticas de Igualdad. "Las declaraciones de la ministra se han realizado dentro del marco de la reunión con el CERMI, en la que se ha hablado de aborto relacionado con la discapacidad. Pero si de lo que hablamos es de problemas graves de salud del feto, lo que finalmente recoja el anteproyecto de ley resolverá todas las cuestiones. Ninguna mujer tendrá que marcharse a otro país".

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Sobre la firma

Mónica Ceberio Belaza
Reportera y coordinadora de proyectos especiales. Ex directora adjunta de EL PAÍS. Especializada en temas sociales, contó en exclusiva los encuentros entre presos de ETA y sus víctimas. Premio Ortega y Gasset 2014 por 'En la calle, una historia de desahucios' y del Ministerio de Igualdad en 2009 por la serie sobre trata ‘La esclavitud invisible’.

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