Consultas para formar Gobierno
El primer ministro belga, el liberal flamenco Guy Verhofstadt, que ha dirigido el país junto con los socialistas durante los últimos ocho años, presentó ayer su dimisión. Es la formalidad que supone el pistoletazo de salida para el inicio de formación de una coalición de Gobierno que podría durar meses. El rey Alberto II aceptó la dimisión y a partir de ahora darán comienzo las consultas de las que debe nacer el nuevo Ejecutivo belga.
Los liberales francófonos se convirtieron el domingo en la fuerza más votada en Valonia y en Bruselas y se sitúan a la cabeza de los aspirantes a formar Gobierno con los democristianos flamencos de Yves Leterme. Los ecologistas, en el sur y en el norte del país, fueron los otros grandes vencedores de la noche electoral y por tanto posibles socios del Ejecutivo.
Los socialistas flamencos, que han formado parte de las sucesivas coaliciones de Gobierno desde 1988, sufrieron la gran caída (del 24,3% en 2003 al 16,3%). Tanto que su líder, Johan Vande Lanotte, hasta anteayer aspirante a primer ministro, abandonó el barco al anunciar su dimisión. Su partido ya ha dicho que no piensa incorporarse a un posible Gobierno dirigido por Leterme.
A sus vecinos del sur, los socialistas valones, tampoco les ha ido mucho mejor. Castigados por incontables escándalos de corrupción en los últimos tiempos no descartaban ayer pasar a la oposición durante una temporada. El Waterloo socialista, titulaba ayer el francófono Le Soir.
