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El uso de la píldora del día después se ha triplicado en los últimos cinco años

En 2005 se suministraron 506.000 dosis, mientras que en 2001 fueron 160.000

El consumo de la píldora del día después se ha triplicado en España en los últimos cinco años. En 2001, los hospitales y farmacias despacharon 160.000 unidades. En 2005, fueron 506.000. Estos datos fueron presentados ayer por la ministra de Sanidad, Elena Salgado, quien señaló que los españoles, y en especial los jóvenes, no perciben el riesgo real que implica mantener relaciones sexuales sin protección. El uso del preservativo ha aumentado, pero no lo suficiente. Desde 2001 se ha registrado también un incremento de las enfermedades de transmisión sexual.

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Los españoles, y en particular los jóvenes, no asocian sexo con riesgo de embarazo o de contagio de enfermedades. Síntoma de esta relajación en las conductas preventivas es el notable incremento en el consumo de la píldora del día después. En 2005 se vendieron a farmacias y hospitales 506.000 unidades de este método contraceptivo de emergencia, frente a las 160.000 comercializadas en 2001. Casi un tercio (30,3%) de las mujeres que la han tomado tiene entre 16 y 19 años, según datos de 2004.

A pesar de que el uso del preservativo es cada vez más frecuente -el 80% de los menores de 30 años asegura haberlo utilizado en su primera relación, según cifras del Ministerio de Sanidad-, también se ha registrado un "ligero repunte en el número de casos de enfermedades de transmisión sexual", según reveló ayer la ministra de Sanidad, Elena Salgado.

Si en las décadas de los ochenta y noventa se registró un descenso continuo en el número de infecciones de transmisión sexual, esta tendencia se ha invertido desde 2001. Así, los casos de sífilis han pasado de 700 ese año, a 1.255 en 2005. Los afectados por alguna infección gonocócica (entre las cuales la principal es la gonorrea), pasaron de 805 a 1.174 en el mismo periodo, según datos del Sistema de Enfermedades de Declaración Obligatoria.

Salgado señaló que "este repunte se debe en parte a la relajación en las conductas preventivas".

Ni siquiera el VIH causa demasiado temor. El 64% de la población cree que el VIH no les afecta, según una encuesta que maneja el ministerio. En España se calcula que existen entre 120.000 y 160.000 personas infectadas con el virus que causa el sida. "La gente se piensa que no va con ellos, que sólo afecta a determinados colectivos como los homosexuales o los drogodependientes", aseguró una portavoz de Sanidad.

De forma paralela, las interrupciones voluntarias del embarazo también han crecido hasta alcanzar en 2003 una tasa del 8,8 por cada mil mujeres, frente a las 5,53 en 1995. Casi el 41% de mujeres que se sometieron a una de estas intervenciones en 2003 tenía menos de 25 años.

Salgado hizo públicos estos datos en la presentación de una nueva campaña para fomentar el uso del condón entre los jóvenes. "Es necesario adoptar medidas para que la población aprenda a evaluar los riesgos correctamente", explicó la ministra.

A la baja percepción del riesgo se une una edad cada vez más baja de inicio de la actividad sexual. Entre los menores de 30 años, la edad media del primer coito es de 17,5 años para los chicos y 18,2 para las chicas, mientras que en los jóvenes de 18 a 19 años desciende a los 16,4 años en los chicos y 16,6 en las chicas.

El doctor Ezequiel Pérez Campos, presidente de la Sociedad Española de Contracepción, consideró normal el incremento del uso de la píldora del día después "porque en 2000, cuando se introdujo, en el país poca gente la conocía y actualmente hay más personas con información". Pérez Campos recalcó que no se trata de un método anticonceptivo regular, sino "de emergencia", que en ningún caso debe reemplazar a los métodos previos al coito.

De hecho, la efectividad de la píldora postcoital (85% si se toma dentro de las primeras 24 horas después del coito) es menor que las pastillas anticonceptivas tradicionales (99%).

Este experto consideró que se debería facilitar aun más el acceso a la píldora postcoital. "Si se usara todo lo liberalmente posible, las cifras de abortos deberían bajar", dijo. En concreto, sugirió que se entregue sin necesidad de receta médica, pues aseguró que no es necesaria. "No es un medicamento peligroso, sus efectos secundarios son muy controlables", anotó, "y al pedir la receta sólo estamos cargando innecesariamente los servicios de sanidad y perdiendo horas importantes". En Francia, esta pastilla se entrega sin receta médica.

La efectividad de la píldora del día después se reduce con el paso del tiempo. Pasadas 72 horas del coito, se reduce hasta alrededor del 50%. Si el embarazo ya se ha producido, su efecto es nulo.

La ministra de Sanidad, Elena Salgado, presenta una campaña para fomentar el uso del condón.
La ministra de Sanidad, Elena Salgado, presenta una campaña para fomentar el uso del condón.EFE

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