Obras y deuda
Horror. No se han terminado las obras que dejarán en el año 2007 a Madrid como "un pincel" y ya nos amenaza de nuevo el faraón Alberto Ruiz-Gallardón con más obras. Necesarias, faltaría más, todas las obras del PP son necesarias y modernizadoras. Y más deuda para Madrid y sus vecinos, deuda que la ha elevado en lo que lleva de mandato a cifras Guinness, cuestión que tampoco nos debiera extrañar porque ya hizo algo parecido endeudando a la Comunidad por decenios.
¿Cuántas obras más deberemos soportar los madrileños para ver esa gran ciudad fascinante que no se cansa en pregonar tan "insigne" gestor? El alcalde y sus ediles podrían hacernos la vida más confortable a los madrileños manteniendo limpia la ciudad, ordenando el tráfico, construyendo colegios, bibliotecas públicas, centros de atención a mayores...
Señor Ruiz-Gallardón, si sólo quiere hacer grandes obras, muchas de dudosa necesidad, deje el cargo hoy mismo, váyase, aunque sea de ministro al gobierno de la ínsula Barataria. Un último favor le pido: no se le ocurra ir de ministro de Obras Públicas.