_
_
_
_

El 'no' parte con ventaja en el referéndum sobre el euro en Suecia

La consulta se celebrará el próximo domingo

Cuando faltan cinco días para que se celebre el referéndum sobre el ingreso de Suecia en la zona euro, los partidarios del no -ex comunistas y verdes- mantienen una holgada ventaja (entre 5 y 10 puntos, según los sondeos) sobre quienes apoyan el . Éstos, los socialdemócratas, en el poder, y los partidos de la oposición de derechas, luchan contrarreloj para cambiar la tendencia en la consulta del próximo domingo. Ayer anunciaron su disposición a aplazar la fecha de la adopción de la moneda única, prevista para 2006, si hay razones que así lo justifiquen.

Los líderes de los cuatro grandes partidos -socialdemócrata, conservador, liberal y cristianodemócrata- enumeraron ayer en rueda de prensa las razones que motivarían ese retraso: que el Pacto de Estabilidad no funcione de modo satisfactorio, que se establezca una equivalencia incorrecta entre la cotización de la corona y el euro o que se produzca algún acontecimiento inesperado que sacuda la situación económica.

El que más se juega en el envite es el primer ministro y líder de los socialdemócratas, Göran Persson, un especialista en victorias electorales agónicas, como las obtenidas en las generales de 1998 y 2002, que se enfrenta ahora al más difícil todavía. Persson, que convenció a su propio partido de las ventajas del euro en marzo de 2001 y anunció la celebración del referéndum el pasado enero, se ha volcado en la campaña llegando a criticar a Francia, Alemania e Italia por su incumplimiento del Pacto de Estabilidad, un factor que considera que ha sido decisivo para enfriar aún más el entusiasmo de la opinión pública sueca por Europa.

El primer ministro ha insistido en que el euro supondrá una bajada de los tipos de interés, un abaratamiento de las importaciones, la apertura del mercado sueco a los inversores extranjeros y la única forma de que Suecia no pierda influencia en las decisiones de la Unión Europea. Pero Persson no las tiene todas consigo. Dos miembros de su Gabinete se han manifestado públicamente en contra del euro, como también lo han hecho las bases sindicales o buena parte de los funcionarios, sobre todo las mujeres.

A favor del se han pronunciado todos los partidos del bloque burgués, a excepción del Partido del Centro, antiguamente Agrario, la mayoría de los jóvenes y los empresarios. El director general de la multinacional de telecomunicaciones Ericsson, Carl-Henric Svanberg, advirtió días atrás de que un no provocaría una reducción de las actividades de su grupo en Suecia y señaló de forma muy gráfica las dificultades que padecen las empresas suecas para competir. "Es importante tener en cuenta que Siemens no trabaja en marcos alemanes, ni Alcatel en francos franceses ni Nokia en marcos finlandeses. Están todos en la zona euro", declaró Svanberg.

El poderío industrial sueco ha menguado en los últimos años con el traslado de las sedes de algunas empresas a otros países. Otras han sido compradas por grupos extranjeros como ha ocurrido con Volvo, adquirida por Ford, o Saab, por General Motors.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Los partidarios del no, capitaneados por el Partido de la Izquierda (ex comunista) y los Verdes, argumentan que el euro traerá subidas de precios, desempleo y descenso del gasto en asistencia social.

El referéndum de adhesión a la UE en 1994 partió a la sociedad sueca por la mitad y ahora en la consulta del euro se pronostica otro resultado por la mínima. Aún quedan entre un 15% y un 20% de indecisos y a los suecos, acordes con su tradición de neutralidad, no les gustan las historias de vencedores y vencidos.

Göran Persson (centro), acompañado de los líderes conservador y cristianodemócrata, ayer en Estocolmo.
Göran Persson (centro), acompañado de los líderes conservador y cristianodemócrata, ayer en Estocolmo.AP

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_