Una muestra enfrenta la visión del harén desde Oriente y Occidente

Sherezade, la mítica heroína de Las mil y una noches, es el símbolo de la mujer oriental. Pero, comenta la escritora marroquí Fatema Mernisi, en Oriente representa el triunfo del intelecto y en Occidente el éxtasis de la voluptuosidad. Las dos visiones se contraponen en la exposición Fantasías del harén y nuevas Scherezades, que reúne unas 130 obras y se presenta hasta el 18 de mayo en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona.

El harén oriental ha llenado las fantasías eróticas del hombre occidental desde principios del siglo XIX. Pintores como Delacroix, Ingres, Fortuny, Boucher, Matisse o Picasso se sintieron atraídos por el exotismo de estos espacios de reclusión en el que imaginaban bellas odaliscas desnudas cuya única función era satisfacer los deseos de su señor. Algunos de estos magníficos cuadros están en la exposición, lo que resulta sin duda un aliciente para todos los amantes del arte. Pero, junto a estas obras, también se exhiben miniaturas turcas, indias y turcas, de gran belleza, en las que la mujer tiene un papel más activo. Con todo, lo más espectacular de esta parte histórica de la muestra, en la que no faltan estampas, libros, cuadros, grabados y dibujos, son las fotografías de Nasir al-Din Shah (1831-1896). Este rey qajarita fotografió de manera compulsiva su harén. Nadie antes lo había hecho y hasta hace poco estos álbumes qajar se habían mantenido escondidos en el palacio Golestan de Teherán. Por primera vez se exponen públicamente en esta exposición y el resultado contradice, con rudeza, el ideal de belleza de las fantasías occidentales.

La exposición está inspirada en el libro El harén en Occidente, de Mernisi, comisaria general de esta muestra que podrá verse en verano en Lyón. En su segunda parte, que tiene como comisaria a Rose Issa, se presenta el trabajo de 13 artistas de Oriente Próximo y el norte de África, que en sus obras cuestionan, con humor o dramatismo, según los casos, los estereotipos femeninos. Entre otras, se presentan trabajos de la iraní Shirín Neshat, la egipcia Ghada Amer, la iraquí Jananne Al-Ani, la palestina Raeda Saadeh, la argelina Samta Benhahia o la turca Selma Gürbüz. Dos exposiciones en una que rompen esterotipos sobre la imagen "impotente y pasiva de la mujer musulmana", que, dice Fatema Mernisi, "tanto interesa reflejar a los medios occidentales".