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El Reino Unido cierra mercados y mataderos por la fiebre aftosa

Isabel Ferrer

El Gobierno británico ordenó ayer el cierre de mataderos y mercados de carne durante una semana, para evitar la propagación de la fiebre aftosa entre el ganado. El traslado de animales también fue prohibido hasta nueva orden, en una medida calificada de 'dura pero necesaria' por el ministro de Agricultura, Nick Brown.

El cuerpo oficial de veterinarios cree haber dado con el foco infeccioso en una granja porcina de Northumberland, en la frontera inglesa con Escocia. Es posible que la enfermedad comenzara allí hace unos 14 días. La granja, sellada desde ayer, había llevado a sacrificar 30 cerdos al matadero de Essex, al sureste del Reino Unido, donde fue descubierta la enfermedad el pasado martes.

Más información
Reino Unido inicia el sacrificio de cerdos para contener el brote de fiebre aftosa

Por lo menos otros 600 ganaderos repartidos por todo el territorio nacional han recabado los servicios del mismo matarife en las últimas semanas. Al saber que los animales de seis explotaciones han dado positivo en los análisis sobre la infección, la Unión de Ganaderos mostró su desánimo. 'Es un contratiempo grave que tantas granjas tengan problemas, pero si el brote surgió en Northumberland será más fácil evitar una epidemia', señaló Kevin Pearce, asesor sindical. La exportación de animales vivos, productos cárnicos y leche seguirá prohibida de momento.

Golpe a la industria

Las restricciones comerciales y la cuarentena de las granjas suponen un nuevo golpe para la industria cárnica, hundida por la crisis de las vacas locas. Para los ganaderos, el cierre de mercados supone la pérdida de ingresos por animales que no pueden ser vendidos en el mercado interior. Las granjas porcinas, arrasadas hace 19 meses por la peste porcina, señalan que esta nueva infección podría arruinarlas. Mientras el Gobierno negocia el monto de las compensaciones que deberá abonar, la Unión Nacional de Ganaderos ha pedido de nuevo a los excursionistas que eviten acercarse a zonas de pasto. Con las partidas de caza de zorros suspendidas durante una semana -los perros podrían llevar la infección de un sitio a otro- las carreras de caballos han sido la siguiente baja. La Sociedad para la Protección de las Aves ha cerrado sus reservas naturales, visitadas todo el año por buena parte de su millón de socios.

La oposición conservadora pidió ayer al Gobierno más información sobre la cuarentena a las granjas y las indemnizaciones. 'Es necesario que el ministerio de Agricultura sea transparente en ambos terrenos y no dé la impresión de ocultar datos', declaró ayer Tim Yeo, portavoz tory de Agricultura.

La fiebre aftosa puede atacar a cerdos, cabras, reses y ovejas. A los animales les salen ampollas en boca y garganta. Dejan de comer y de producir leche y, aunque no mueren, hay que sacrificarlos porque la infección les debilita e impide su venta. En el Reino Unido sólo hay un caso documentado de contagio humano, en 1966.

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