Sin santuario para ETA

El presidente electo, Vicente Fox, no piensa dar ninguna facilidad a los miembros de ETA domiciliados en México, a los que llamó delincuentes. "México no va ser refugio de delincuentes de ninguna manera", subrayó ayer en una conferencia de prensa con corresponsales extranjeros. "Ciertamente, eso habría que distinguirlo de refugiados políticos. México siempre será la casa de todo aquel que sea atacado políticamente, agredido por razones políticas".Fox se manifestó dispuesto a encarrilar antes del 1 de diciembre una solución al problema de Chiapas, donde una guerrilla zapatista se sublevó hace seis años, y mostró especial interés en conocer en detalle los Pactos de la Moncloa, que facilitaron la consolidación de la democracia en España después de la dictadura del general Franco. "Nos interesa la logística detallada de cómo se llevó a la práctica, cómo se organizó, porque nuestra meta es la convergencia". "Sería de tontos", manifestó, "no compartir