La versión española de 'Rolling Stone' ofrece una mirada musical hispana
El número uno de la revista sale hoy a la venta
La versión española de la legendaria revista musical norteamericana Rolling Stone inicia una aventura que se propone igualar o superar a la original. "Queremos españolizar el Rolling Stone, no ser un satélite de ellos", dijo ayer su director, Andrés Rodríguez. La revista mensual, editada por el Grupo PRISA, que sale hoy a la venta, tiene a Alejandro Sanz en la portada e incluye un excepcional dossier fotográfico de los músicos españoles y una entrevista con Brad Pitt.
Una revista sobre el rock y la vida. El eslogan del Rolling Stone español habla por sí solo del espíritu de la publicación. "Es más importante la mirada rolling stone que daremos al contenido que los nombres que van a figurar en él", explicó ayer Andrés Rodríguez. "No vamos a descubrir nuevos artistas, sino a hablar de los que la gente prefiere, aunque siempre desde una perspectiva propia y original. Lo importante es que sea una historia rolling stone".La presentación del primer número de esta revista, que sale hoy a la venta al precio de 325 pesetas y con una tirada de 200.000 ejemplares, contó con la participación de Ignacio Quintana, director de la empresa editora Progresa, y Juan Cruz, director de coordinación editorial del Grupo PRISA. Quintana subrayó que no se trata de la traducción de la edición norteamericana. "Llevaremos una media del 50% de contenido español y de música latina, aunque ya en el primer número la parte americana ha quedado algo más reducida", dijo. "Pienso que es la revista que nos demanda la sociedad porque habla de las cosas y actitudes que la música implica. No sólo apostamos por la música española y latina, sino también por el cine, la televisión, la moda y la literatura".
A gran altura
Rolling Stone, creada por Jann S. Werner hace 32 años en Estados Unidos, está considerada la revista musical más influyente del mundo y vende un millón de ejemplares de cada número quincenal. Se publican ediciones en Australia, Alemania, Argentina y Japón.
"El Rolling Stone español debe tener la calidad del americano, pretendemos por lo menos ponernos a su altura. Queremos españolizar el Rolling Stone, que sea el referente de la música hispana en un momento en que triunfa en el mundo", afirmó Andrés Rodríguez.
En cuanto al público al que se dirige, el director trazó una línea clara. "No es una revista para fans preadolescentes. Es para gente de 18 años para arriba, a la que le gusta leer. Rolling Stone fue una de las cunas del llamado nuevo periodismo, una revista donde han escrito autores como Tom Wolfe, P. J. O"Rourke o Hunter Thompson y han publicado fotos Richard Avedon, Herb Ritts, Annie Leibovitz o Sebastião Salgado. Son artistas que se han acercado a determinado personaje y lo han retratado con otros ojos. A veces convirtiéndose ellos mismos en protagonistas del artículo por encima del propio personaje. Es lo que pasa en la entrevista que publicamos con Brad Pitt, en la que el autor intenta averiguar si el actor americano es tan tonto como parece".
El reportaje tiene unas osadas fotos del actor de El club de la lucha vestido de mujer.
El contenido del primer número tiene clara identidad española. Una extensa entrevista con Alejandro Sanz revela la miel y la hiel del músico de Más. Actualmente, Sanz prepara con Miguel Bosé una adaptación de Don Juan.
Un excepcional dossier fotográfico con 63 figuras clave del pop rock español entrelaza los encuentros en forma de entrevista entre Miguel Bosé y Lucía Etxeberría, Ketama y Francisco J. Satué, Joaquín Sabina y Moncho Alpuente, Andrés Calamaro y Patricia Godes, Rosana y Claudia Larraguibel o Ana Torroja con Merche Yoyoba, entre otros.
Cine, libros y televisión
La crítica de discos, tanto internacionales como españoles, y la crítica de cine y libros también tienen un espacio fijo, así como secciones de anécdotas del mundo musical. La televisión tampoco está ausente. Una sección mensual ofrecerá su perspectiva de lo que se nos ofrece a través de la caja tonta.
En el apartado literario, este número incluye un documento fuera de serie: Johnny Depp escribe un artículo sobre la generación beat (Kerouac, Ginsberg y otros "bastardos que arruinaron mi vida", dice).
Como el Rolling Stone original, la edición española no se detiene en las creaciones y sus creadores. Un reportaje sobre el campamento Calamocarro, en Ceuta, titulado La última frontera, recoge el testigo de una inquietud por los más candentes problemas sociales y políticos.
