_
_
_
_

Alemania propone reunir un Consejo Europeo informal en Bonn en febrero

Alemania se dispone a convocar un Consejo Europeo de carácter informal para acelerar las negociaciones sobre la Agenda 2000, ahora empantanada en una guerra de trincheras. Fuentes diplomáticas españolas indican que la presidencia alemana ha sondeado a los socios comunitarios para celebrar en Bonn el próximo 26 de febrero una reunión de jefes de Estado y de Gobierno para analizar una propuesta de acuerdo que debería ser aprobada en el Consejo Extraordinario previsto para un mes más tarde.

El canciller Gerhard Schröder parece decidido a aprovechar la presidencia de la UE para zanjar un debate que amenaza con paralizar la ampliación europea. La reunión informal de Bonn permitirá a los jefes de Estado y de Gobierno reunirse sin la presión de tener que aprobar conclusiones, y hacer un ensayo general del decisivo consejo extraordinario previsto en Bruselas para el 24 de marzo. Se espera que Schröder presente en Bonn el gran cuadro económico de gastos e ingresos de la UE para los próximos siete años y que sondee las posibilidades de un consenso que hoy parece lejano.

En juego están no sólo los miles de millones de euros que se gastarán entre los años 2000 y el 2006 en subvencionar la agricultura comunitaria, las inversiones en obras públicas o en investigación, sino cómo afectará a esos presupuestos la prevista ampliación a los países del Este.

Fuentes diplomáticas españolas recuerdan que el consenso no será posible si se pretenden realizar recortes en el presupuesto comunitario a costa de las políticas de cohesión económica y social; Sin embargo, indican que España se muestra abierta a negociar políticas de ahorro, por ejemplo la reducción de las subvenciones agrícolas aunque no su renacionalización. Madrid también está dispuesto a aceptar el techo de gasto comunitario del 1, 26 del PIB, una vez que se conozca el conjunto de las políticas comunitarias. España, Portugal y Grecia temen que los países más ricos quieran financiar la ampliación al Este con los fondos que ahora reciben, con lo que se daría la paradoja de que sean los países con menor renta de los Quince los que financien la ampliación.

Schröder, que llegó al Gobierno alemán con un compromiso electoral de reducir la contribución alemana al presupuesto comunitario, ha subrayado su interés en reducir los Fondos de Cohesión, lo que se considera muy injusto en Madrid, Lisboa y Atenas.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_