Al guapo Noriega le rompen la cara
Un joven guapo, rico y triunfador con las mujeres sufre un accidente que le desfigura la cara. Este brutal cambio en la vida del protagonista de Abre los ojos lo lleva a enfrentarse a situaciones que nunca hubiera sospechado y su esquizofrénica relación con dos chicas lo conduce a los límites de la locura. "Escribí el papel pensando en Eduardo Noriega", comenta Amenábar, "porque es atractivo, tiene estilo y una enorme capacidad de trabajo". Tras su descubrimiento en Tesis, el actor cántabro ha participado en algunos filmes, pero en la nueva película de Amenábar ha afrontado su papel más difícil. "Eduardo ha demostrado", afirma el director, "que es un gran actor y, sobre todo, lo pone de relieve en las secuencias en las que actúa con una máscara puesta".Toda la trama gira en torno al personaje de Noriega y, de hecho, el resto de actores se desenvuelve como contrapunto de este muchacho destrozado. El realizador de Abre los ojos no escatima ningún tipo de elogios hacia Penélope Cruz: "Está en su mejor momento, hasta ahora, porque su carrera no ha hecho más que comenzar. Tiene una magia y un encanto increíbles y es capaz de conquistar a la cámara nada más entrar en acción. Está fabulosa".
Dos actrices distintas
Alejandro Amenábar rechaza de plano que haya cambiado de modo gratuito a Ana Torrent, intérprete de Tesis, por Penélope Cruz. "Ana hizo un trabajo magnífico en aquella película al igual que Penélope en ésta. Son dos papeles diferentes que exigían actrices distintas. Estoy seguro de que volveré a trabajar con Ana Torrent".Junto a Noriega, el alicantino Fele Martínez ha vuelto a rodar a las órdenes de Amenábar "por su gran capacidad camaleónica" y para otro de los papeles principales el realizador ha buscado a Chete Lera, un actor de teatro casi desconocido en la pantalla grande. "Busqué a Chete porque respondía físicamente al psiquiatra de la trama y podía reflejar su evolución a lo largo de la película. Estoy muy satisfecho de que haya roto ese tópico de que el actor de teatro no suele funcionar en cine". La inquietante Najwa Nimri, esposa y actriz preferida del realizador Daniel Calparsoro, completa la nómina.
Tras confesar que en esta película ha concedido más libertad a los actores que en Tesis, el director explica: "Empiezo a tener fama de tratar a los actores como robots y no es cierto. Admito que planifico todo y sé lo que quiero conseguir de ellos, pero hablo con los actores antes de rodar. Ahora bien, cuando estamos filmando soy bastante inflexible porque lo llevo todo pensado".
