Decapitados 14 civiles por extremistas argelinos
Poco antes del inicio, el pasado domingo del mes sagrado del Ramadán, presuntos grupos integristas argelinos decapitaron a 14 civiles, según desvela la prensa del país magrebí. Cinco de los asesinatos se produjeron en Ued Sebt, en los montes de Guraya, cerca de Tipaza, a unos 50 kilómetros al oeste de la capital, según el diario Liberté. Los otros nueve acaecieron en el otro extremo del país, en Bir el Ater, cerca de Tebesa, a 600 kilómetros al este de Argel.
Los incidentes de Ued Sebt sucedieron durante la noche del pasado viernes, cuando un comando guerrillero, compuesto de 10 personas, asaltó la población y se llevó como rehenes a cinco vecinos, tras haber saqueado sus viviendas apropiándose de mantas, utensilios de cocina y varios corderos. Las pesquisas y rastreos efectuados por los demás vecinos y las fuerzas de seguridad culminaron horas más tarde con el hallazgo, de los cinco cadáveres en un descampado. Los cuerpos estaban mutilados y sus cabezas separadas del tronco, como es usual en este tipo de acciones.El mismo día en que sucedieron los incidentes de Ued Sebt otro grupo guerrillero irrumpía en el pueblo de Bir el Ater, cerca de Tebesa, donde secuestró y, decapito a seis personas más. Pocos días antes, al parecer el mismo grupo armado había secuestrado y degollado en la región a otros tres campesinos, según asegura el periódico El Acil.
El Grupo Islámico Armado (GIA), la organización integrista supuestamente responsable de estas acciones (y del asesinato de decenas de extranjeros desde hace tres años), intenta de está manera desmarcarse del proceso de paz que trata de impulsar el presidente de la República, Liamín Zerual, y que cuenta en principio con el apoyo del ilegalizado Frente Islámico de Salvación (FIS), que pocos, días después de la toma de posesión de Zerual reconoció la legitimidad de su elección y se manifestó dispuesto al diálogo con el Gobierno.Guerra entre integristas
La actitud del FIS, que puede arrastrar a su brazo militar el Ejército Islámico Armado (AIS), ha provocado la cólera del GIA, que se ha lanzado a una guerra abierta contra el partido islamista que lideran Abasi Madani y Alí Belhay.Las luchas que enfrentan a los grupos integristas han sido desautorizadas y condenadas por algunos de los jeques loca les del GIA. Éste es el caso de Sid Ali Benhayar, un ex alcalde de Medea y ex militante del FIS, quien desde el maquis ha hecho llegar un comunicado a los medios de información en el que se declara en rebeldía frente a Yamel Zituni el jefe supremo del GIA, a quien acusa de "desviacíonista y , apóstata". El comunicado acaba haciendo un llamamiento a los sectores integrantes del Grupo Islámico Armado para que desobedezcan a Zituni y se declaren como él en rebeldía.
