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Una red "narcos" utilizó a unos niños para traer hachís de Marruecos

Jan Martínez Ahrens

Los culeros vestían pantalón corto. Unos 50 menores, según cálculos policiales, han sido embaucados o forzados en los últimos dos años por una red de narcotraficantes de Madrid para viajar al norte de Marruecos y traer hachís oculto en sus intestinos o en sus maletas. Los pequeños correos, de 14 y 15 años, eran reclutados en las salas de billar y juegos recreativos de los alrededores de la glorieta del Pintor Sorolla, en el distrito de Chamberí. El supuesto cabecilla de la banda de narcos, Philippe Kadour Mohammed, un corpulento Y bien vestido francés de 30 años, llegaba a los sitios de reunión de los muchachos en una moto de gran cilindrada, soltaba dinero a espuertas e invitaba a quien se le acercaba, especialmente aquellos con problemas afectivos o de integración. Luego les ofrecía la oportunidad de trabajar con él y alcanzar su tren de vida. Por el viaje a Ceuta y Melilla les prometía 60.000 pesetas, que al final nunca eran pagadas.En caso de negativa, Kadour, a quien la policía considera un hombre con facilidad para tratar a los críos, tenía preparada una cohorte de matones, entrenados en gimnasios y expertos en artes marciales, que se dedicaban a amedrentar, desvalijar -desde los zapatos hasta las cintas de música- y apalear a los remisos. Las amenazas y coacciones llegaban incluso al ámbito familiar. Muchas de estas agresiones fueron denunciadas como robos con intimidación en las comisarías. El temor de los chavales les impedía ir más allá en sus declaraciones. efectuaba en tren. El billete lo pagaba la organización criminal.

Los menores viajaban en grupo de tres o cuatro. Un miembro de la banda les vigilaba durante todo el trayecto. Al llegar a Algeciras, embarcaban rumbo a Ceuta o Tánger. Allí, en los barrios de chabolas del extrarradio, los chavales recogían la droga. La ingerían en bolas, no mayores que una bellota y envueltas en látex. Unas 80 cada uno. Aquellos que no eran capaces de tomar el hachís eran obligados a traslada lo escondido entre su equipaje. El enviado de los narcotraficantes les advertía que en caso de peligro nadie les iba a socorrer.

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Isra el Loco

La banda de 'narcos' escogía a chavales con problemas afectivos y de integración

El pasado fin de semana, la banda al completo, fue detenida. La policía se incautó de 300 gramos de droga, procedente de las bolas transportadas en los intestinos por los menores. Los investigadores sostienen que esta organización funciona desde hace dos años y que por sus manos han pasado unos 50 chavales en 17 casos la policía afirma que posee pruebas de este abuso.Los chavales sometidos por los narcos han vuelto a sus hogares o bien han sido acogidos en centros de tutela de la Comunidad. La Fiscalía sigue su evolución.

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Sobre la firma

Jan Martínez Ahrens
Director de EL PAÍS-América. Fue director adjunto en Madrid y corresponsal jefe en EE UU y México. En 2017, el Club de Prensa Internacional le dio el premio al mejor corresponsal. Participó en Wikileaks, Los papeles de Guantánamo y Chinaleaks. Ldo. en Filosofía, máster en Periodismo y PDD por el IESE, fue alumno de García Márquez en FNPI.

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