La victoria electoral de Elchibéi legitima la toma del poder por el Frente Popular en Azerbaiyán
ENVIADO ESPECIAL Abulfaz Elchibéi, líder del Frente Popular (FP), es el nuevo presidente de Azerbaiyán, según los datos preliminares de las elecciones celebradas el domingo en esta explosiva república transcaucásica. Estos comicios legitiman el poder que de hecho el FP asumió a mediados de mayo, cuando se apoderó de los puestos clave de Azerbaiyán después de haber hecho fracasar el retorno a la jefatura del Estado del comunista Ayaz Mutalíbov.
Más del 60% de los votos han sido para Elchibéi, informó ayer el secretario del FP, Mejinán Guséinov. Sin embargo, Dzhafar ,Velíyev, jefe de la Comisión 'Electoral Central, dijo que era temprano para que el FP cantara victoria, ya que sólo hay información oficial sobre cuántas personas han votado. El domingo, según Velíyev, participó el 73% del censo electoral.
Los datos del FP están basados en las informaciones de los apoderados que esta organización tiene en las mesas, y coinciden con lo que todas las encuestas ya predecían.
Elchibéi, de 54 años de edad, es oriundo de la República Autónoma de Najicheván, separada de Azerbaiyán por una franja de territorio armenio. Orientalista, trabajó como traductor en Egipto a principios de los sesenta. De allí regresó sin un solo kópek, pues, como ha explicado en una reciente entrevista, consideraba 11 amoral enriquecerse en un país donde hay tantos pobres". Por ello, todo lo que había ganado lo repartió entre los necesitados de El Cairo.
Comenzó a actuar en política en sus años universitarios, y trató, sin éxito, de crear una organización clandestina para luchar por la independencia de Azerbaiyán. Como profesor, se esforzó por "despertar la conciencia nacional" de los estudiantes. "Pensábamos que nuestra nación había sido esclavizada y nuestro país convertido en una colonia", explica Elchibéi. Sus actividades terminaron como era usual en la Unión Soviética: en 1975 fue arrestado y pasó año y medio preso por "premeditadas calumnias escritas y orales contra el régimen soviético".
En aquel entonces en Azerbaiyán gobernaba, como jefe del Partido Comunista de la República, Gueidar Alíyev, paisano de Elchibéi, que después, como miembro del Politburó del PCUS, fue una de las figuras más influyentes de la ex URSS. Lo interesante del caso es que Alíyev es hoy el presidente de Najicheván, autonomía con la cual Bakú quiere mejorar sus relaciones, últimamente bastante tensas.
A Azerbaiyán no le conviene en absoluto que la república autónoma se declare independiente, cosa que algunos observadores no descartan. Por eso Elchibéi se mostró moderado con respecto a Alíyev en su última conferencia de prensa: "Ya veremos. Llegaremos a un acuerdo, pero hay que ser prudentes. Le podría ofrecer la cartera de Exteriores, pero no sé cuál sería su reacción. Quizá se sentiría ofendido", dijo Elchibéi.
Azerbaiyán y Moldavia son las dos únicas repúblicas que todavía no han ratificado su ingreso en la Comunidad de Estados Independientes (CEI). Y ahora Azerbaiyán no lo hará, ha prometido Elchibéi, quien desea desarrollar las relaciones con las repúblicas de la ex URSS sólo a partir de acuerdos bilaterales.
