"España estuvo en el frente de la prudencia", según Fernández Ordóñez
"España estuvo en el seno de los Doce dentro del frente de la prudencia", aseguró ayer el ministro español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, al comentar a EL PAÍS el reconocimiento por la CE de Croacia y Eslovenia. "Esta posición fue la de la gran mayoría: evitar que la precipitación en un tema tan delicado crease más problemas de los que pretendía resolver", añadió.España se sumó ayer a la decisión comunitaria con una nota de la Oficina de Información Diplomática que afirmaba que "el ministro de Asuntos Exteriores solicitará al Consejo de Ministros su autorización para establecer relaciones diplomáticas" con las dos repúblicas. El texto no menciona, en cambio, el caso de las repúblicas de Macedonia, y Bosnia-Herzegovina, cuyo reconocimiento queda aplazado.
El Gobierno español, sin embargo, no piensa abrir por el momento embajadas en Liubliana y Zagreb. La hipótesis más probable es que el representante diplomático español en Austria esté también acreditado en Eslovenia, mientras el representante de Madrid en Hungría lo sea también en Croacia. Se trata de una solución semejante a la adoptada en el caso de los países bálticos.
El ministro Fernández Ordóñez subrayó por otra parte que "esta decisión tiene una doble dimensión. Por un lado la de tomar nota de una realidad hoy innegable, y por otra la de facilitar la continuación del proceso de paz auspiciado por lord Carrington".
El ministro aseguré que "en líneas generales se mantuvo en esta cuestión la cohesión comunitaria", por la cual España "ha apostado desde el principio de la crisis". Añadió que "hubo una casi unanimidad entre los Doce para considerar que es la decisión de reconocimiento la que hoy más favorece la paz. Esta unanimidad, sin embargo, no existía en el caso de Bosnia y Macedonia".
