Guarderías inseguras
En relación con el artículo publicado el pasado domingo 9 sobre la inseguridad en los colegios, quiero añadir algo. Y es que la inseguridad afecta también a las guarderías, donde hay niños de uno a cuatro años de edad. Conozco a fondo la situación porque yo trabajo en una de estas guarderías, situada en el barrio madrileño de San Blas.Las cuidadoras del centro nos vemos obligadas a hacer una limpieza exhaustiva del patio antes de sacar al recreo a los niños cada mañana.
En numerosas ocasiones nos encontramos jeríriguillas, preservatívos usados, todo tipo de desperdicios y basuras. Una vez en el patio, hay que lidiar además con los chicos del barrio, que nos insultan y escupen sistemáticamente, cuando no nos apedrean para romper persianas y ventanas, aparte de usar la fachada de la guardería como mural para sus pintadas.
Su valentía llega al extremo de agredir al perro aprovechando que está atado.
Las denuncias no llegan a formalizarse ante la Policía Municipal, ya que, según ésta, no se puede hacer nada sin los nombres y apellidos de los agresores.
¿Tenemos que hacer también nosotras esa investigación? ¿Tenemos que ejercer nosotras la labor de protección? En ese caso, ¿para qué necesitamos a la Policía Municipal?-