_
_
_
_
LA SUCESIÓN DE REAGAN

Moscú desea la continuidad republicana

La URSS, que ha ofrecido a sus ciudadanos una información equilibrada y profesional de las elecciones norteamericanas, desconocida en el pasado, se ha decantado por George Bush en nombre de la continuidad de la política exterior del presidente Ronald Reagan. En Europa occidental, sin entusiasmo y con matices, el grueso de los responsables políticos y económicos de la Comunidad Europea (CE) parece inclinarse también por el candidato republicano. Pero esta predisposición hacia Bush no es achacable a sus cualidades, sino a las deficiencias de su rival, el demócrata Michael Dukakis.

PILAR BONET / IGNACIO CEMBRERO Nikolai Sliunkov, el miembro del Politburó elegido para pronunciar el tradicional discurso conmemorativo del aniversario de la revolución de 1917, hizo un positivo balance de las relaciones soviético-norteamericanas con las siguientes palabras: "Se profundiza el diálogo soviético norteamericano en el que por primera vez ha aparecido el elemento de una herencia constructiva.La alusión a la herencia era interpetada en medios occidentales como una clara alusión a las preferencias por Bush en un contexto desapasionado que no ha escatimado referencias críticas y elogiosas, indistintamente, a ambos candidatos.

Durante las últimas semanas, diversos políticos soviéticos han tenido que contestar a preguntas sobre sus preferencias en las elecciones norteamericanas. Durante su encuentro con el dirigente italiano Ciriaco de Mita, Gorbachov se decantó claramente por los republicanos, según contó después el propio De Mita. El líder soviético dijo que los demócratas piensan mucho y luego no tienen fuerzas para llevar a cabo sus intenciones, en tanto que los republicanos piensan menos y hacen mb.Por su parte, Nikolai Shishlin, vicejefe del departamento de propaganda del Comité Central, dijo recientemente que el diálogo norteamericano continuará sin pausa.

En Bruselas, los políticos de la CE consideran que, para empezar, a diferencia de Bush, Dukakis tiene el defecto de carecer de experencia internacional y de ser prácticamente un desconocido. en Europa, un continente al que, a pesar de los consejos de sus asesores, rehusé viajar en vísperas de su campaña electoral para poder rebatir así más fácilmente la acusación de inexperiencia.

Aunque, junto con su adversario se ha declarado opuesto al proteccionismo, Bush ha prometido que en cuatro años colocaría al comercio exterior de EE UU en situación excedentaria, algo que sería más fácil conseguir erigiendo barreras arancelarias que abriendo nuevos mercados.

Un ejemplo reciente ilustra, según un funcionario comunitario, los conflictos que podra suscitar con la CE. Mientras Reagan vetó en octubre una ley restrictiva del Congreso sobre importaciones textiles que, por primera vez, incluía a Canadá y a los doce en la llamada "cuota global", Bush se abstuvo de hacer comentarios pero en regla general ha compartido la filosofia liberal del actual presidente. El entorno de Dukakis señaló, en cambio, que era favorable a la ley.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

En defensa, Bush representa también la continuidad con una política conocida y sus alusiones a la necesaria convocatoria, tras su elección, de una cumbre de la OTAN para definir una política común de cara al Este agradan a la mayoría de sus socios atlánticos. Pero Dukakis, con su llamada Iniciativa de Defensa Convencional para reforzar el armamento clásico en Europa Occidental, inquieta a algunos aliados.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_