Pírrica victoria del Gobierno noruego en el debate sobre armamento atómico
El Gobierno conservador de Kare Willoch, en Noruega, logró sacar adelante el lunes en el Parlamento, por la mínima ventaja de un voto, la decisión de instalar cohetes con carga nuclear en su territorio, en el marco de los planes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para Europa occidental.El Gobierno logró impedir a duras penas que prosperaran dos propuestas de votación de desconfianza contra el ministro de Defensa, Anders Sjaastad, acusado de haber omitido datos al Parlamento relativos a la contribución financiera del país para la construcción de rampas de emplazamiento de los cohetes.
Por un voto pudo evitarse la moción de censura, que hubiera significado la renuncia del ministro de Defensa noruego.
Los observadores políticos consideran que la votación del Parlamento ha sido una victoria pírrica para el Gobierno, ya que en una cuestión de tan vital importancia nacional era preciso un respaldo más amplio. Por otra parte, es la primera vez desde el ingreso de Noruega a la OTAN, en 1949, que se plantea una cuestión de confianza contra un ministro en problemas de seguridad.
Con tan débil respaldo, el Gobierno de Willoch deberá afrontar también una oposición cada día más fuerte de amplias capas de la población contra el armamentismo y la instalación de armas nucleares en su territorio. De acuerdo a los planes de la OTAN, el emplazamiento comenzará a finales de 1983. Era tradicional en los países nórdicos, hasta ahora, que en los temas de seguridad y política exterior se alcanzase un consenso entre los partidos burgueses y socialistas, pero esa tradición empieza a resquebrajarse.
El tema de las armas de la OTAN divide también a partidos y opinión pública en Dinamarca, donde los socialdemócratas han solicitado una reunión de la comisión de política exterior del Parlamento para exigir que Dinamarca se abstenga en las Naciones Unidas de votar en contra de una propuesta conjunta de Suecia, México e India, por la cual se congela la instalación de los Pershing 2 en los países de Europa occidental.
