Colaboración antipalestina entre los servicios secretos alemán e israelí
El portavoz oficial del Gobierno de Bonn ha confirmado que agentes del servicio secreto israelí han interrogado, junto con sus colegas alemanes, a detenidos palestinos recluidos en la cárcel bávara de Straubing.Antes de que se produjese ayer esta confirmación, el semanario Der Spiegel denunció el hecho en el número de esta semana, añadiendo un factor de suma gravedad que compromete seriamente la actuación del servicio de espionaje alemán (BND): uno de los expertos israelíes convenció, al parecer bajo amenazas, a uno de los detenidos para que asesinase en Beirut al jefe del servicio secreto de la Organización para la Liberación de Palestina, Abu lad.
Una vez en libertad el encargado de realizar esta misión, Mohamed Justif, decidió suicidarse, en lugar de eliminar al dirigente palestino. Josuf y otros tres militantes de la OLP habían sido detenidos el pasado mes de abril en la frontera austroalemana, cuando se les sorprendió con una gran cantidad de explosivos en sus equipajes.
Al explicar el portavoz del Gobierno federal las razones que movieron al servicio secreto alemán, dependiente directamente de la Cancillería, a contratar a expertos israelíes del servicio secreto correspondiente (Mossav), el portavoz, secretario de Estado, Klaus Boelling, dijo a los periodistas que va en interés de la lucha contra el terrorismo el invitar a una colaboración en este sentido a expertos de otros países ocupados en la misma tarea.
El propio Boelling añadió que «no es incorrecto» tener por verdadero el que los agentes israelíes tratasen con medicamentos a los detenidos, con el fin de hacerlos más dóciles en sus declaraciones.
Tanto el Gobierno de Baviera como diputados del Parlamento federal han reaccionado con gran alarma ante el caso. El ministro del Interior del Gobierno de Munich, GerodI Tandler, que fue informado el jueves por su colega federal, Gerhard Baum, ha calificado el asunto como «un escándalo de primer orden».
En los interrogatorios de los cuatro palestinos habían tomado parte también algunos funcionarios de los servicios secretos de Baviera (LKA). Los expertos israelíes fueron presentados a los detenidos como intérpretes. Según el ministro Tandler, este caso tendrá como consecuencia inmediata el sembrar la desconfianza entre las fuerzas de seguridad bávaras y el BND.
El propio ministro federal del Interior, Baum, ha comentado a este respecto: «Nos hemos metido en una situación increíble.» Como «episodio increíble» lo ha calificado el portavoz del Partido Liberal para asuntos interiores, que ha pedido al Gobierno que se fijen responsabilidades.
La reacción de las partes afectadas, Israel y OLP, no se han hecho esperar. El Gobierno israelí ha acusado al semanario Der Spiegel de tratar de envenenar las buenas relaciones entre los dos servicios secretos. El representante de la OLP en Bonn ha dicho a su vez que no descarta acciones de réplica.
