La "cumbre" árabe de Bagdad no boicoteará a Sadat
La conferencia de ministros de Asuntos Exteriores de la Liga Arabe, reunida en Bagdad, ha adoptado un «plan contra las iniciativas de Egipto» en favor de una paz separada con Israel, que será sometido a la reunión de jefes de Estado. Según se desprende de las declaraciones formuladas por los países moderados, la cumbre anti-Sadat, que comenzará hoy, no aprobará la serie de medidas prácticas de boicot a El Cairo propuestas por sirios y palestinos.Las divisiones entre el sector moderado y radical del mundo árabe se han agudizado en la capital iraquí, pese al compromiso inicial de unos y otros para acallar, en todo lo posible, esas diferencias y concretarse a una plataforma de acción destinada a «recuperar» al presidente egipcio. Los representantes de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) fueron los primeros en romper la consigna de silencio y declararon que «nada positivo saldrá de Bagdad», haciendo referencia a la hostilidad manifestada por Arabia
Según la OLP, los ministros siguen divididos profundamente sobre la estrategia futura de la Liga Arabe, ya que la mayoría no desea lanzar acciones concretas contra Sadat. El documento de trabajo presentado por la organización palestina, en el que se condenan los acuerdos de Camp David, se critica la politica hostil de Estados Unidos al mundo árabe y se proponen medidas prácticas para boicotear a Egipto, ha sido desechado en sus elementos esenciales.
Aunque no se ha dado a conocer el contenido del «plan de acción» adoptado por el comité político integrado por Irak, Jordania, Kuwait, Siria, Túnez y la OLP, explicando que debe ser sometido primero a la cumbre, se sabe que comprende las ofertas iraquíes de enviar tropas de ese país al Golán y crear un fondo anual de 9.000 millones de dólares para las «fuerzas árabes de la resistencia». Sobre ambos elementos existe un consenso general entre los veintiún países presentes en Bagdad, pero donde se evidencia sus divisiones es en lo relativo a las medidas coercitivas contra Egipto propuestas por los «progresistas». Arabia Saudita excluye por completo el principio de sanciones contra El Cairo y su expulsión de la Liga Arabe:
