Januzaj da la victoria y el primer puesto del grupo a Bélgica
Los belgas se medirán a Japón en octavos mientras que Inglaterra se enfrentará a Colombia
Solo Januzaj quiso ganar. Un golazo del jugador de la Real Sociedad decantó un partido aburrido en el que ambos equipos evitaron hacerse daño. Ya se conocía el cuadro antes de comenzar el encuentro, y ambas selecciones salieron a especular. Lo intentó más Bélgica, que en la primera parte probó a Pickford con varios disparos desde fuera del área y que en la segunda mitad acabó por decantar el marcador a su favor ante la falta de intensidad de los ingleses. Con este resultado, Bélgica jugará en octavos contra Japón e Inglaterra, que cae en el teórico lado bueno del cuadro, se enfrentará a Colombia por un puesto en cuartos.
Ambas selecciones ya tienen garantizada su presencia en los octavos de final de la Copa del Mundo después de ganar sus dos primeros encuentros. Se enfrentan para decidir qué equipo terminará el Grupo G como líder. En consecuencia, tanto Gareth Southgate como Roberto Martínez han tomado la decisión de rotar al equipo y reservar a las estrellas para los octavos de final. En 'Los Diablos Rojos' solo juega Thibaut Courtois y Dedrick Boyata con respecto a los que ha venido utilizando 'Bob' en este Mundial mientras que en 'Los Tres Leones' descansan futbolistas de la talla de Harry Kane, Kyle Walker, Dele Alli, Raheem Sterling o Jesse Lingard, entre otros.
Ser primero de grupo en este caso no garantiza cruces más asequibles. Al contrario. La selección que gane liderará el Grupo G e irá por el lado más complicado del cuadro, en donde esperan combinados nacionales como Brasil, Portugal, Francia y Argentina, entre otras. En cualquier caso, si empatan se dirimiría la posición final en base a las tarjetas amarillas acumuladas o por sorteo.
Las tarjetas amarillas se han convertido en un elemento a tener en cuenta dado que resuelven los desempates. Cada amarilla que recibe un jugador se castiga con un punto, la doble amarilla se sanciona con tres puntos y la tarjeta roja directa con cuatro. El mayor castigo es para un jugador que ve primero amarilla y luego roja directa (cinco puntos). En ese sentido, Bélgica ha sido amonestada con tres tarjetas amarillas por dos que ha visto el equipo inglés.
Será la tercera ocasión que Inglaterra y Bélgica se enfrenten en una Copa del Mundo. Los ingleses no han perdido ninguno de los dos anteriores duelos, empatando (4-4) en 1954 y ganando por la mínima (1-0) en 1990 con un estético gol de volea de David Platt. En el acumulado de enfrentamientos, Bélgica tan solo ha conseguido una victoria en 21 enfrentamientos contra Inglaterra (5E - 15D), algo que se remonta ya a mayo de 1936 (3-2).
Bélgica está arrasando en esta Copa del Mundo. En cada una de sus dos victorias se ha impuesto por un margen de tres goles (Bélgica 3-0 Panamá y Bélgica 5-2 Túnez). Tiene por delante un reto contra Inglaterra y es que ninguna selección en toda la historia de la Copa del Mundo ha enlazado tres triunfos con semejante diferencia de goles. De ganar a 'Los Tres Leones' con un margen de tres goles entrarían de lleno en la historia mundialista.
'Los Diablos Rojos' que comanda Roberto Martínez tienen una gran representación de futbolistas que militan en la Premier League. Hasta nueve belgas (Thibaut Courtois, Simon Mignolet, Toby Alderweireld, Vicent Kompany, Jan Vertonghen, Kevin de Bruyne, Nacer Chadli, Marouane Fellaini y Eden Hazard) tienen experiencia en el fútbol inglés.
El que tuvo también un pasado por la Premier League fue Roberto Martínez, actual seleccionador belga. Dirigió a equipos como Swansea City, Wigan Athletic y Everton antes de asumir el cargo de Bélgica en agosto de 2016. Desde entonces, 'Los Diablos Rojos' han cosechado 16 victorias en 22 partidos (5E - 1D).
El partido será dirigido por el esloveno Damir Skomina. Asistido en las bandas por Jure Prapotnik y por Robert Vukan, este árbitro internacional desde el año 2002 y que habla hasta cinco idiomas diferentes (esloveno, croata, inglés, italiano y serbio) participó en esta Copa del Mundo dirigiendo el Colombia 1-2 Japón y fue cuarto árbitro durante el Brasil 2-0 Costa Rica. Arbitró al Liverpool en la vuelta de las semifinales contra la Roma y que supuso a la postre el billete para la final de la Champions League que más tarde perdió a manos del Real Madrid.