El “dedo divino”

El Partido Popular es la única de las grandes formaciones que no celebra primarias. Todo depende únicamente de la designación del presidente nacional, Mariano Rajoy. Es lo que Esperanza Aguirre ha llamado siempre el “dedo divino”. Esta situación hace que sea prácticamente imposible saber las posibilidades que tienen los candidatos de optar a los principales puestos políticos de los Ayuntamientos y Comunidades autónomas.

En el caso de Madrid, son varios los nombres que se han barajado y postulado de forma velada. El PP (Rajoy ahora y, anteriormente, José María Aznar) elige a sus candidatos en virtud de diversas encuestas realizadas antes de las elecciones. No se ha filtrado la última realizada por el PP en los pasados meses o semanas, por lo que todo son especulaciones más o menos interesadas. Pero sí se sabe que los nombres consultados en los sondeos, entre otros, son Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno en Madrid; Esperanza Aguirre, presidenta del PP regional; Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta, e, incluso, Pío García-Escudero, presidente del Senado .

Todos siempre han negado estar interesados en postularse como candidatos al Ayuntamiento de Madrid y, posiblemente, sea cierto hasta hoy, cuando Aguirre se ha mostrado “a disposición” de Rajoy para intentar el asalto al Consistorio. El Partido Popular tiene muy difícil, por no decir casi imposible, volver a repetir una mayoría absoluta en el Ayuntamiento de la capital , según admiten destacados cargos de la formación. La aparición de UPyD y de Ciudadanos terminará restándole votos, pero la irrupción de Aguirre –si se confirma su candidatura- provocará un giro a la derecha en un intento de recuperar a las “bases de siempre”, aquellas que se muestran muy disgustadas con las políticas más centristas de Mariano Rajoy. Para ellos, Aguirre es su lideresa indiscutible.