El Rey, el Gobierno y todos los partidos ensalzan a Wojtyla

La Casa del Rey, el Gobierno y todos los partidos españoles, desde el PP a IU, expresaron ayer su pesar y condolencias por la muerte del papa Juan Pablo II, nacido en Polonia como Karol Wojtyla, cuya figura ensalzaron. El luto decretado para hoy en toda España y con ampliaciones locales, implicó además la suspensión de la campaña electoral en el País Vasco y de la visita de Estado que debía iniciar ayer el emir de Bahrein, alterando todas las agendas.

Don Juan Carlos y doña Sofía acudieron, pasadas las ocho de la tarde de ayer, a cumplimentar al nuncio en Madrid, Manuel Monteiro de Castro. El sábado por la noche, el Rey envió un telegrama al Vaticano en el que decía: "Rendimos homenaje a la memoria del Santísimo Padre por su abnegado servicio a la cristiandad y su infatigable labor a favor de la paz, la justicia y la dignidad humana".

Pasadas las 10.15, la vicepresidenta primera, la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, vestida de luto, había expresado en la misma nunciatura la solidaridad del Ejecutivo "con millones de hombres y mujeres en todo el mundo, pero en especial con los católicos de nuestro país y su Iglesia".

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero alabó el sábado al Papa fallecido como "una de las figuras mundiales más relevantes de la historia reciente" y un "referente moral de primer orden, tanto para los cristianos como para los no cristianos", en un telegrama remitido a la Santa Sede.

El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que acudió a cumplimentar a Monteiro de Castro, destacó que Wojtyla "ayudó a derrumbar muros psicológicos, políticos e ideológicos y a reconciliar al continente europeo", realizando una labor sin la que hoy no se entendería "la Europa de los Veinticinco".

Para el líder del PP, Mariano Rajoy, que estuvo en la nunciatura, Juan Pablo II "deja una huella imborrable" por su apertura al diálogo ecuménico, su contribución a la paz, su magisterio eclesial y su testimonio frente al dolor y la enfermedad. "Va a ser un referente histórico permanente de la paz", añadió durante su visita el secretario general, Ángel Acebes.

El coordinador de IU, Gaspar Llamazares, que disiente del "conservadurismo" de Wojtyla, centra su pésame al Vaticano en el reconocimiento del "compromiso personal" del difunto "en favor de la paz y de los derechos humanos, como hizo palpable con sus denuncias ante la guerra de Irak".

A este mismo aspecto se refirió el lehendakari, Juan José Ibarretxe, que, "más allá de los aspectos doctrinales y morales que se pueden o no compartir", describió a Juan Pablo II como "un líder espiritual y social del siglo XX y comienzos del siglo XXI". "Su continua lucha contra la violencia y las guerras y en favor de la paz en el mundo, reflejado aquí por el trabajo incesante que la Iglesia vasca realiza para conseguir la paz en Eukadi, dan fe de ello", añadió.

Siguiendo indicaciones vaticanas, Zapatero tiene previsto presidir la delegación que asistirá a los funerales en Roma y que incluirá a los ministros de Exteriores y Justicia. La Casa del Rey espera que la Santa Sede defina el protocolo de estos actos para concretar la representación que le corresponde.