Las ventas de música caen en España el 45% desde 2005, casi el doble que en Europa
La Federación Internacional de la Industria Fonográfica publica un informe sobre sus resultados
La Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI, en sus siglas inglesas) no está nada satisfecha con las ventas de música. Además, considera a España "uno de los peores mercados" del continente. Según la nueva edición del anuario que acaban de hacer público, Recording Industry in Numbers 2010 (la industria discográfica en cifras), las ventas de música grabada en España han descendido un 43% en los últimos cinco años. Esta cifra casi duplica la media europea, el 23%.
"No es casualidad que los usuarios de P2P sean en España el doble que la media europea", opina el estudio, que explica que un 32% de internautas españoles usan con frecuencia este tipo de redes para compartir archivos, frente al 15% de media en Europa. En Promusicae, (productores de música de España), comparten la crítica. "La ley que está en camino ignora por completo las graves consecuencias que provoca el P2P en nuestro país. Así difícilmente se puede establecer un orden tecnológico que permita promover un libre mercado para vender música grabada en nuestro país", opina el presidente de esta asociación, Antonio Guisasola, en un comunicado sobre este tema.
Un mercado diferente
Estas organizaciones resaltan los cambios que se han producido en su negocio. "En la actualidad, basta con despachar 7.000 ejemplares, ya sea físicos o a través de los nuevos canales digitales, para alcanzar el número 1 en ventas; en 2004 aún hacían falta unas 26.000 unidades para merecer este honor", detalla el texto de Promusicae. El disco más vendido en todo el mundo en 2009 fue I dreamed a dream, de Susan Boyle, con 8,3 millones de unidades.
Según la IFPI, los sellos discográficos licenciaron más de 11 millones de canciones para comercializar a través de más de 400 servicios legales de música en formato digital, desde las descargas en iTunes o Amazon a la escucha por streaming através de Spotify o Deezer. Con estas cifras, se pretende atajar el argumento de que no están abiertos a las posibilidades que ofrece Internet. Guisasola señala: "¿Puede alguien seguir diciendo que no hay alternativa legal a la piratería digital de música?"
Suben las ventas digitales pero no contrarrestan la bajada de las físicas
La caída de las ventas en todo el mundo fue del 7,2 por ciento respecto a 2008, para situarse en un global de 17.000 millones de dólares (cerca de 12.700 millones de euros). El mercado digital creció en todo el mundo en un 9,2%. Ese buen resultado no fue suficiente para contrarrestar la caída (12,7%) en las ventas de formatos físicos.
Un total de 14 mercados terminaron el curso con un balance positivo frente al ejercicio anterior. Entre los países que encarnan esta pequeña recuperación figuran el Reino Unido, Australia y México. El crecimiento en Suecia y Corea del Sur fue superior al 10 por ciento: Promusicae atribuye este éxito a "la entrada en vigor de nuevas leyes para la defensa de la creación musical". En el extremo opuesto, las mayores caídas del año se registraron en Canadá (un descenso del 7,4%), España (14%) e Italia, que perdió un 17%.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.